El delegado regional de la Federación Agraria de Entre Ríos, Alfredo Bell, informó que la entidad que integra planteará hoy en la audiencia pública de Villaguay, la necesidad de una disminución de la carga tributaria en la tarifa eléctrica rural, y que no avalará el aumento del 50 por ciento en el importe, reclamado por las cooperativas eléctricas. También indicó que la Federación defenderá el sistema cooperativo de distribución de electricidad en el sector rural, ya que “permite un servicio eficiente”, que ni el Estado ni los privados jamás “tuvieron interés en prestarlo”.
Bell se refirió a la audiencia pública que tendrá lugar en Villaguay, por el pedido de aumento en la tarifa de la energía realizado por las cooperativas eléctricas de la provincia, adelantando que desde la Federación Agraria solicitarán “una disminución de la carga tributaria de la electricidad, que compense lo que reconocemos como pérdida o como desfasaje de los ingresos que tienen las cooperativas”.
Asimismo, explicó en declaraciones realizadas a Enter.ar que este planteo se relaciona con los “socios” que tienen la tarifa, que son los municipios, la provincia y la Nación.
En ese contexto, señaló: “De lo que el productor saca de su bolsillo para pagar la electricidad, en realidad sólo un parte va a la cooperativa, porque otra parte importante queda en manos de entes públicos, que son socios para recibir y no aportan nada”. Además, destacó que esa parte de la tarifa eléctrica que queda en manos del Estado está integrada por impuestos y tasas, que son elevadas de acuerdo al presente del agro.
Si bien reconoció que existe un atraso en la tarifa, Bell subrayó que la Federación Agraria no apoyará el pedido de un 50 por ciento de incremento de la misma: “No podemos ser suicidas en plantear una cosa que sabemos no va a tener, en el corto y mediano plazo, las garantías de prestación del servicio”, afirmó al respecto.
También manifestó que defenderán el sistema cooperativo de distribución de electricidad en el sector rural, y recordó que este trabajo que se viene desarrollando desde hace más de 30 años “permite un servicio eficiente, donde el Estado en su momento y luego los privados, nunca tuvieron interés en prestarlo”.
Por último, marcó las divergencias entre el servicio rural y el urbano: “Tenemos una densidad de usuarios de líneas muy baja, por cada casi un kilómetro de línea hay un usuario. Hay dificultades con los caminos, con las tormentas. La prestación del servicio es mucho más complicada por el ámbito en el cual se presta”, concluyó.