Tarifa nacional con cupos numerados; seguridad en los accesos; eliminación de las fumigaciones sobre los camiones; accesos transitables; playas con condiciones dignas, que cuenten con baños, comedor y seguridad; cumplimiento por parte del gobierno nacional del acta firmada el 31 de octubre de 2011; atención de los gobiernos provinciales, son las solicitudes que componen el reclamo de los transportistas.
La medida de fuerza, por el nivel de acatamiento que se prevé y la extensión de la misma, significa un serio inconveniente para los productores de maíz, que se encuentran en plena cosecha y requerirán de fletes para transportar el producto, consignó Gualeguaychú a Diario.
De todos modos, desde la Fetra, decidieron esta vez priorizar la situación particular del sector. “Compañero, no viaje. Apueste a su futuro ¡Basta de ser funcionales a las multinacionales!”, exhortaron en la difusión de la huelga.
El acta rubricada el 31 de octubre de 2011 por quien fuera hasta hace poco secretario de Transporte de Planificación Federal, Juan Pablo Schiavi, y otros funcionarios en representación del Estado nacional, plantea la implementación de un piso básico (que lleva el aumento de la tarifa a un 12 por ciento) para el transporte de cereales, oleaginosas, afines, productos, subproductos, derivados y fertilizantes; como así también la creación de una comisión de trabajo para el transporte de granos, integrada por representantes de Fetra y autoridades competentes para resolver los problemas del sector.
Su desconocimiento por parte del gobierno, llevó a la Fetra a definir en febrero una medida de fuerza, que comenzará a aplicar desde este lunes y por tiempo indeterminado. En ese momento, mientras la soja alcanzaba los 500 dólares en las pizarras del mercado de Chicago, el gremio de los transportistas de granos emitía un comunicado en el que recordaba que “el día 31 de octubre de 2011, luego de firmar el acta acuerdo con las autoridades del gobierno nacional, se levantó el paro”, y cuestionaba que “a poco más de cuatro meses se sigue sin respuesta a lo firmado”.
En ese marco, unos días atrás, el titular del Consejo Central Ejecutivo de Fetra, Ovidio Rodríguez, difundió una carta abierta a la presidenta Cristina Fernández en la que esbozó duramente la situación del sector. “Nuestros asociados son pequeñas empresas familiares, que representan más del 60 por ciento del parque automotor de cargas, y transportan la riqueza de nuestro país. Estamos al servicio de la producción agropecuaria, la agroindustria y el comercio internacional de granos. Desde hace años soportamos el maltrato y abuso por parte de las multinacionales; las grandes empresas cerealeras y los pooles de siembra. Estos sectores son los responsables de las condiciones paupérrimas de salud, higiene y seguridad en las playas portuarias; y de las fumigaciones sobre los camiones, práctica que le costó la vida a muchos compañeros”, planteó en la misiva.
Y fustigó: “Estas empresas dominantes del mercado de granos nos imponen una tarifa para los fletes que nos obliga a trabajar por debajo de los costos, causando un grave perjuicio a nuestras economías familiares, y un evidente envejecimiento del parque automotor. Esta problemática fue planteada en diversas oportunidades a la Secretaría de Transporte de la Nación, con quienes finalmente en el mes de octubre de 2011firmamos un acuerdo que resolvía los reclamos expresados. Dicho compromiso no fue cumplido en ninguno de sus puntos”.
“Es inevitable que nuestros representados se sientan víctimas del engaño, la mentira y el destrato impartido por sus funcionarios”, concluyó el gremialista respaldando la utilización de la herramienta del paro para captar la atención de las autoridades a nivel provincial y nacional.