“En estos días hubo mucha playa, disfrutar el mar, un lugar que uno no se habitúa por las distancias. Pero siempre con la cabeza en lo que a uno le gusta, en lo que uno hace, siempre con el equipo y con el club muy presente”, señaló Pipo en diálogo con La Opinión.

En referencia a la celebración de su natalicio, Cáceres se mostró “contento por cumplir un año más, por poder estar disfrutándolo en familia”. Además, señaló estar “bien en todo sentido, estoy con muchas ganas, me hubiese gustado jugar en Primera División a los 22, 23 años, cuando las energías son otras, pero la verdad que estoy muy bien de ánimo”.

El mediocampista que debutó durante este semestre en el círculo de privilegio aseguró que el descanso “siempre viene bien, sobre todo para volver a empezar cuando pasas un último tramo con circunstancias como las que pasamos nosotros”. Y agregó, en referencia al último tramo del torneo de Rafaela: “Cuando viene la mala te pesa hasta la pelota entonces el descanso es bueno para recuperar la frescura, la energía”.

Sobre esa mala racha del equipo de Carlos Trullet, el entrerriano señaló: “Creo que es una situación normal que le pasa a todos los equipos. Godoy Cruz a nosotros nos ganó en la última fecha, no ganaba desde la fecha 14, otros equipos han tenido que afrontar rachas peores que la nuestra. Además todos los ascendidos han sumado casi igual que nosotros”.

Al mismo tiempo, aseguró que en esa etapa “incidieron lesiones, suspensiones y también los rivales juegan, te empiezan a conocer y te empiezan a tapar los puntos más fuertes”. Y añadió: “Ahora tenemos que estar abocados a mejorar en todos los puntos que hemos fallado, tratar que el margen de error sea el mínimo porque la racha hay que cortarla y arrancar de la mejor manera porque siempre el segundo semestre es muy duro y muy complicado. El que más fuerte esté de la cabeza saldrá mejor parado”.

Por otra parte, el volante hizo alusión a la lesión de rodilla que le impidió formar parte de la campaña que devolvió a Atlético Rafaela a la Primera División: “La verdad que a mí me costó muchísimo. La recuperación no fue la mejor en el sentido de los tiempos. Volví a jugar contra Belgrano por primera vez después de diez meses y sinceramente jugué en aquella parte final del ascenso con muchas limitaciones, muchos miedos, dudas y con un año detrás prácticamente sin actividad. Entonces cuando te agarran ese tipo de situaciones, a los 32 años es mucho más complejo”.

Igualmente, Pipo aseguró que siguió entrenando de la misma manera: “Siempre trato de ser lo más profesional posible las 24 horas del día y siempre tuve la ilusión de poder recuperarme. Creo que puedo seguir dándole cosas a este grupo, al equipo y a la institución, que tanto ha confiado en mí. Tengo palabras de agradecimiento a muchas personas que me han bancado, porque es así. Para este proyecto había muchas dudas y la verdad que la gente que tuvo que confiar en mí se la jugó, vio un jugador que no estaba al 100 por ciento y confió que le podía dar algo. Más allá de jugar por uno, por la familia, por la gente que me apoya, no me voy a olvidar nunca de los que toman decisiones en el club”.

Por último, Cáceres se refirió a su actuación por la Copa Argentina, donde su equipo superó a Ferro Carril Oeste en los penales, por 4 a 2: “Cuando venís sin jugar, cuando sumás pocos minutos se complica, para cualquier jugador de fútbol, tenga 20 ó 30 años. Haber entrado en ese partido, con la seriedad que se merecía la situación, con el compromiso que lo tomamos con todos los compañeros, se hizo un partido muy bueno y nos sirvió a muchos y al técnico también para darse cuenta que hay muchos muchachos que estaban entrenando y que estaban esperando la oportunidad. Eso fue el punto de inflexión para poder terminar estos últimos partidos en cancha”.