El presidente de la Asociación Bancaria, Juan Carlos Navarro, consideró que la decisión del Banco Central de hacerse cargo de 190 millones de pesos por la deuda que mantiene el Banco de Entre Ríos Sociedad Anónima (BERSA) “dará más seguridad al oferente porque quiere decir que la entidad está capitalizada”. A su vez, entendió que brindará la posibilidad al banco de funcionar normalmente mientras se desarrolla el proceso de venta.
Navarro opinó que la decisión del Banco Central favorece por el hecho que en el caso de que no se llegue a dar una situación de venta en el corto plazo posibilitará que “el banco pueda funcionar normalmente, y no que esté fuera de normas técnicas del Banco Central”.
Según el dirigente, “la mayor tranquilidad la da para el funcionamiento del banco”, para que “no tenga que estar en una situación difícil mientras se está discutiendo la situación de venta”. Lo dijo teniendo en cuenta que “según el decreto 348 del Poder Ejecutivo en seis meses se tenía que vender y llevamos más de dos años, por lo tanto nadie tiene asegurado de que en este semestre también se pueda vender”. Si bien “es la decisión del Central, pueden surgir imprevistos que hacen que se dilate más”, sostuvo.
Consideró en diálogo con APF que el principal interesado con posibilidades de quedarse con el Nuevo BERSA es el Grupo Azkenassi, que controla los bancos provinciales de San Juan, Santa Fe y el Banco de Santa Cruz. Aunque han circulado versiones acerca de que también el Banco Hipotecario está buscando la posibilidad de comprar un banco minorista, y el Patagonia. Navarro admitió que “está todo más direccionado a Azkenassi que fue el que entró segundo en el proceso del Banco Suquía”.