Una mujer que se considera meretriz denunció en la fiscalía de turno de Tribunales que nueve personas –jugadores de rugbiers del Club Estudiantes de Paraná– la sometieron sexualmente a ella y a otra trabajadora. La denuncia fue radicada el fin de semana ante el fiscal Héctor Godoy. La presentación sigue su curso y ahora la jueza en turno, Marcela Badano, será quién en definitiva deberá resolver los pasos a seguir y cómo encuadrar la carátula del expediente. No obstante, una versión indicó que la magistrada se declararía incompetente en la causa, por ser familiar directo de uno de los directivos más importantes del Club Estudiantes.

Allí se hizo saber, por parte de la afectada, que el viernes pasado fueron contratadas para efectuar un servicio sexual nocturno en una quinta cercana al barrio Los Pipos de Paraná, en una fiesta de recepción de un estudiante que se había graduado en kinesiología. Sin embargo, al llegar, los hombres se negaron a pagar la suma de dinero pautada y frente a la reticencia a participar sin el consentimiento de la fiesta privada, fueron violadas en reiteradas oportunidades por los hombres que se desempeñarían en la primera división de un club de rugby de la capital entrerriana.

La mujer anunció que a través de la Asociación de Mujeres Meretrices de la República Argentina (AMMAR), se producirá un escrache a la entidad a fin de lograr que “no se tape a los denunciados y además se logre saldar la deuda moral y económica”.

Ante esto, desde Uno se comunicaron con las integrantes de la entidad gremial que agrupo a las meretrices en Paraná y, si bien hubo algún tipo de recelo en la información, se indicó que “violar una prostituta es un delito que se encuentra penado en el Código Penal. Lo importante es que las compañeras realizaron la denuncia para desvirtuar cualquier idea de que se esté frente a un invento de la situación”. Ante esto, aseguraron: “Defenderemos los derechos de las trabajadoras y reclamaremos que no haya en la causa ni hijos ni entenados”.

Una versión indicó que la magistrada se declararía incompetente en la causa, por ser familiar directo de uno de los directivos más importantes del Club Estudiantes. La citada jueza subrogante es nuera de José Lino Churruruarín, uno de los hombres de la conducción del CAE y por ende se apartaría del expediente.