A 98 días del debut en el Mundial de Nueva Zelanda, Los Pumas tenían una exigente prueba ante los difíciles Barbarians franceses, después de 188 días sin jugar. Y por eso, al ser el primer partido del año en un calendario tan acotado, la victoria por 23 a 19 es aún más valiosa.

En un lugar hasta ahora virgen de rugby como el estadio Libertadores de América, y con el estreno de la camiseta, Los Pumas salieron a jugar un partido que no dio respiros en el inicio, con los dos equipos muy activos, que buscaron en todo momento el try. El primero que lo consiguió fue la visita, por intermedio de Guillaume Boussés, a los 12 minutos, tras cortar por el centro y apoyar debajo de los palos. La conversión consiguiente le permitió a los Barbarians, entonces, ponerse 7-0.

La ventaja duró menos de diez minutos, porque después de un largo tiempo de posesión, llegó el try argentino. A los 21 minutos, Borges ganó metros e inició una combinación explosiva entre Leguizamón, Camacho y Fessia, quien sería el encargado de apoyar. La conversión de Contepomi le aportaría los puntos necesarios para igualar el trámite.

Siete minutos más tarde, Adrien Planté, tras una jugada en la que Los Pumas fallaron tres tackles consecutivos, consiguió el segundo try de los Barbarians para volver a estar arriba (12-7). Pero Los Pumas no se rindieron. Figuerola se perdió un try pero minutos después tuvo revancha, cuando a los 37 apoyó el segundo try para el seleccionado nacional. Contepomi, exigido por la posición, no pudo conseguir la conversión y ambos se fueron 12-12 al descanso.

En el segundo tiempo, el técnico Santiago Phelan apostó a los cambios para probar otros jugadores. Por eso, Bustos y Fessia les dejaron sus lugares a Orlandi y Campos, y Figuerola hizo lo propio con Alfredo Lalanne. Los nombres no cambiaron la esencia del equipo, que a los 18 minutos encontró una pequeña ventaja, con un penal convertido por Contepomi para pasar al frente (15-12) por primera vez en el partido, informa Clarín.

Pasaron cuatro minutos para que el diez de Los Pumas volviera a aumentar la ventaja, esta vez por intermedio de un try para el 20-12. En la conversión, sin embargo, Felipe no pudo subir a diez puntos la diferencia entre los dos conjuntos. Y a los 26 minutos el lamento fue en aumento cuando Gerhard Vosloo aprovechó una desconcentración, se filtró y llegó al try debajo de los palos.

A seis minutos del final, Contepomi reapareció para subir la ventaja a cuatro puntos y poner el marcador 23-19. En los instantes finales todo fue para los Barbarians, que presionaron contra el in-goal y casi llegan al try, que hubiese significado la derrota del equipo argentino. Pero la defensa estuvo sólida y Phelan no pasó sobresaltos desde el banco. Fue victoria para Los Pumas, en esta recta final hacia el Mundial, a cuatro años de aquel Mundial de Francia que tantas alegrías le dio al rugby argentino. El próximo sábado, en Chaco, la revancha.