Con la soga al cuello. Así está Echagüe, es una situación muy difícil, que presiona y asfixia. Pero también es la realidad y como tal hay que afrontarla. En la noche de este sábado el conjunto paranaense tiene que ganar o ganar. Otro resultado no le sirve. Debe hacer un trabajo perfecto y superar la adversidad. Perder es quedar eliminado, es sepultar todo tipo de sueños e ilusiones.
La serie favorece a Monte Hermoso Basket por 2 a 1, por lo que el local, en el caso de ganar, conseguirá cerrar la llave a su favor y alcanzar el pase a los cuartos de final de la categoría.
Aquella derrota en el primer choque hoy duele mucho más que la noche en la que se perdió. Hoy el equipo está lamentando mucho la manera que regaló un partido que estaba controlado y que parecía cerrado. Después se corrigió el rumbo y se viajó a Monte Hermoso con mucha expectativa como para dar vuelta la serie.
Son dos las chances que el AEC afrontó como para ponerse nuevamente con ventaja deportiva. Una ya la desperdició. Ahora le queda la última. ¿Cómo reaccionará el conjunto de Sebastián Uranga para salir a flote? El jueves tuvo una noche para el olvido. Solo Omar Cantón mostró su chapa de jugador franquicia. El resto estuvo por debajo de su nivel habitual.
Ahora el equipo debe ser equipo, más que nunca. Cada uno debe cumplir con su labor en función del conjunto. La defensa debe corregir deficiencias, mostrase activa, concentrada y agresiva como para que los mejores exponentes del contrario no sobresalgan.
Claro está, enfrente estará un equipo que irá por todo, que sabe que está a un paso de pasar de instancia y que desde ya irá por semejante oportunidad. No será sencillo, ni para Echagüe ni para Monte Hermoso. Habrá que tener una noche con lucidez. El AEC la necesita, al menos como para seguir con vida, señala Paraná Deportes.