Panchi Solari recordó a Diego Marodona, contó anécdotas y se refirió a la foto que tiene con él.
En diálogo con el programa A Quien Corresponda, que se emite por Radio De La Plaza (94.7), el Panchi se mostró emocionado desde el comienzo: “Es muy difícil hablar de Diego en este momento porque me emociono. La verdad es que estoy quebrado desde ayer y se me hace difícil hablar”.
Enseguida nomás el ex defensor contó que “a partir de que se supo la noticia fue todo conmoción. Después salí un poco a caminar por la ciudad, por los lugares donde vivo y se notaba una tristeza muy grande. Había un respeto total, un silencio profundo y creo que en ese silencio se homenajeó al más grande jugador de la historia”.
A la hora de las anécdotas, Solari narró: “Tuve la suerte de conocerlo y la mala de no enfrentarlo. Cuando fue a Reconquista, recuerdo que me agarró paperas, allá por 1973 cuando fue con los Cebollitas. De igual modo lo vi jugar, estuve al lado de él”.
Más adelante se refirió a la foto que tiene con Maradona en su celular, justamente la que ilustra la entrevista, y comentó: “Quería esa foto y cuando vino a Gimnasia lo primero que pensé es que no puedo dejar de pedirle esa foto. Una sábado que jugábamos contra Unión de Santa Fe, en inferiores, con el Coco San Esteban nos acercamos al entrenamiento y nos dijeron que cuando terminara él nos iba a atender y fue así. Nos acercamos, le pedimos la foto y él generoso aceptó”.
A lo que añadió: “Recuerdo que nos pidieron que no lo toquemos y esas cosas y en el momento de la foto dije 'lo abrazo, si se enoja…'. Nada de eso pasó, le dije que era de Reconquista y que me acordaba cuando fue con Argentinos Juniors, enseguida recordó y me dijo 'los goleamos y después comimos un asado'. La verdad una prodigiosa memoria”.
En el cierre, el ex jugador de Gimnasia, Racing, Patronato, entre otros, expresó: “A los que amamos este deporte, Diego nos marcó la vida deportivamente hablando, era el único que nos podía hacer llorar frente a un televisor”.
A continuación toda la entrevista con Juan Esteban Solari: