Ucrania acusa a Rusia de incumplir el alto el fuego y paraliza la evacuación de civiles

Voluntarios sanitarios trasladan en ambulancia a una persona herida por los bombardeos en Mariupol.

Voluntarios sanitarios trasladan en ambulancia a una persona herida por los bombardeos en Mariupol.

Sin calefacción, casi sin agua y sin electricidad. Un millón de personas resisten desde hace tres días en condiciones críticas en la ciudad portuaria de Mariupol, sitiada por las fuerzas de Vladímir Putin. Este sábado, el Ejército ruso ha anunciado un alto el fuego parcial y breve para esa ciudad y para la localidad también sureña de Volnovaja, lo que permitiría establecer el corredor humanitario acordado por los negociadores ucranios y rusos el jueves. La alcaldía de Mariupol ha denunciado, sin embargo, que Rusia no está respetando el alto el fuego de momento y que sigue usando “artillería dura y cohetes” contra la ciudad, desde la que no se puede establecer un paso seguro para los civiles bajo el fuego.

Los expertos ya habían dudado del cumplimiento ruso de la medida y advierten de que el alto el fuego, que tiene como garante a la Cruz Roja, según Ucrania, podría beneficiar a Rusia, que puede aprovechar para reagruparse, reabastecerse y, cuando haya salido la mayoría de la población civil, lanzar una dura ofensiva para ocupar Mariupol, una ciudad estratégica en el mar de Azov para avanzar en sus planes de crear un corredor desde la península ucrania de Crimea, que se anexionó ilegalmente en 2014, y el Donbás, publicó el diario El País de España.

El alto el fuego empezaba a partir de las 11 (hora de Ucrania) y hasta las 16, según el Ministerio Defensa ruso. El Gobierno ucranio ha explicado que el plan es evacuar de la ciudad portuaria a unas 200.000 personas y que puede que se necesite hacer en varias fases. Más de 15.000 personas necesitan salir de Volnovaja, situada entre el Mar de Azov y la ciudad de Donetsk, controlada por los separatistas prorrusos apoyados por el Kremlin desde 2014.

La localidad, de 21.000 habitantes, está prácticamente arrasada por los bombardeos, los cadáveres yacen en las calles sin poderse recuperar y la ciudadanía que queda en Volnovaja permanece en los refugios sin poder salir debido a los ataques y se están quedando sin comida, según el diputado local Dmitro Lubinets.

Si el alto el fuego sigue adelante, quienes logren salir de Mariupol y Vonovaja -ambas en la región de Donetsk que Rusia ya no reconoce como parte de Ucrania, sino como estado independiente como reclaman los separatistas prorrusos- se dirigirán a la ciudad Zaporiya. “Dado que nuestra ciudad está constantemente bajo el fuego y los ataques despiadados de los ocupantes, no hay otra solución”, se ha lamentado Vadim Boichenko, alcalde de Mariupol, en un comunicado en el que declaró que esta sería la primera de varias evacuaciones.

La ministra para los territorios ocupados de Ucrania, Iryna Vereshchuk, ha advertido que las tropas rusas pueden aprovechar el alto el fuego para avanzar sobre posiciones ucranias, pero, aun así, el Gobierno está trabajando en acordar otros corredores humanitarios para Jergón, Sumi y Chernihiv (al Noroeste de Kiev), destacó el diario El País.

 

Antecedentes

 

Emma Beals, investigadora no residente en el Middle East institute, que ha estudiado las pautas de las estrategias rusas en Siria, por ejemplo, donde su apoyo fue clave para el régimen de Bachar el Asad, destaca que el alto el fuego y los corredores humanitarios son extremadamente necesarios para evacuar a la población civil y la entrada de asistencia humanitaria, pero que los acuerdos rusos deben tomarse con “grandes dosis de escepticismo”.

“En Siria, hemos visto a Rusia aceptar ese alto al fuego que no cumplió y ofrecer corredores humanitarios que eran inseguros o inapropiados y no podían utilizarse”, señala. “Históricamente, Rusia ha aceptado aplicar un cese al fuego solo cuando está en línea con sus ambiciones estratégicas, con lo que puede ser una victoria militar completa”, advierte Beals.

Tras dos mesas de diálogo, los enviados de Ucrania y Rusia pactaron el jueves que se habilitarían pasos temporales para los civiles en las urbes que están en situación crítica porque han sido rodeadas por el ejército ruso. Está previsto que las conversaciones entre los equipos de Kiev y Moscú se reanuden este sábado, pero solo si hay avances en el desarrollo de los corredores humanitarios, han precisado fuentes ucranias.


El Kremlin asegura que los ucranios se niegan a “ofrecer a los civiles la posibilidad de salir por los corredores humanitarios”.

La guerra continúa

 

El portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Igor Konashenkov, ha recalcado este sábado que el cerco a Mariupol -que, según sus palabras, está aplicando las fuerzas de la autoproclamada “república popular” de Donetsk- se sigue estrechando. Rusia asegura que se ha hecho con el control de otras pequeñas localidades de la zona.

El Ministerio de Defensa ruso asegura que sus bombardeos, que están dejando pueblos y ciudades ucranias reducidos a escombros, están siendo de precisión quirúrgica y no tienen como objetivo zonas residenciales y acusa a Kiev de utilizar a civiles como escudos humanos y atacar a las fuerzas rusas desde áreas residenciales. El Gobierno ucranio denuncia que el ejército ruso ataca con fuerza infraestructuras civiles y áreas habitadas por civiles, publicó el diario El País.

Mientras, las fuerzas de Putin, que asegura que quiere “desnazificar” Ucrania, siguen tratando de avanzar por otros flancos del sur para hacerse con el control de la ciudad portuaria de Odesa y arrestar al Gobierno ucranio el acceso al mar. Ya controlan la ciudad de Jersón, la primera gran urbe en caer bajo manos rusas, donde han apagado las líneas de telecomunicaciones ucranias para aislar la ciudad de las comunicaciones del resto del país y donde el viernes por la noche decenas de personas salieron a las calles a protestar contra la ocupación rusa.

A medida que la ofensiva rusa se endurece, el presidente ucranio, Volodímir Zelenski, va elevando el tono para reclamar ayuda a sus aliados. Este sábado, en un video publicado en redes, ha tratado de enviar un mensaje esperanzador a la ciudadanía ucrania que ha huido el país -alrededor de un millón de personas, según la ONU-. “Estoy seguro de que pronto podremos decirle a nuestra gente: ‘Volved, regresad desde Polonia, Rumania, Eslovaquia y todos los demás países. Volved porque ya no hay amenaza”, ha dicho.

Para Ucrania, el mayor desafío son los ataques aéreos, ha dicho el ministro de Defensa, Oleksi Reznikov, este sábado. “Aviones de todo tipo están bombardeando ciudades, pueblos e infraestructura civil, incluidas plantas nucleares e hidroeléctricas críticas y peligrosas”, ha asegurado.

La OTAN rechazó ayer por la noche establecer la zona de exclusión aérea que el presidente Zelenski había pedido, y reclamó que no intervenga por aire ni por tierra por temor a que Rusia extienda su agresión a otras partes de Europa. Crear la zona de exclusión, explicó el secretario de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg, requeriría desplegar aviones de combate de la OTAN y posiblemente “derribar aviones rusos”. “Como aliados de la OTAN, tenemos la responsabilidad de evitar que esta guerra se intensifique más allá de Ucrania”, dijo Stoltenberg. “Hemos dejado claro que no vamos a entrar en Ucrania, ni en tierra ni en el espacio aéreo ucranio”, añadió.

Zelenski cargó contra la decisión de la Alianza que ve como una señal de debilidad y división de la OTAN. “Todas las personas que mueran a partir de este día también morirán por vuestra culpa”, dijo el presidente ucranio en un vídeo, en el que agregó que el rechazo de la Alianza a actuar ha supuesto para Moscú una señal de “luz verde” para atacar pueblos y ciudades de Ucrania.

NUESTRO NEWSLETTER

La ex ministra de Salud de la provincia, Sonia Velázquez, contó por primera vez en un medio periodístico aspectos centrales de la violencia que le propinó José Ángel Allende y gran parte de la indiferencia del gobierno de entonces.

La ex ministra de Salud de la provincia, Sonia Velázquez, contó por primera vez en un medio periodístico aspectos centrales de la violencia que le propinó José Ángel Allende y gran parte de la indiferencia del gobierno de entonces.

Deportes

El gualeyo Lisandro Martínez volvió a entrenar y se ilusiona con la Copa América

El zaguero gualeyo volvió a entrenar con sus compañeros de Manchester United (Foto: X ManUtd_Es)

Quique Club

Quique Club celebró sus 94 años de vida y su presidente, Norma Romero, dejó sus sensaciones.

Dante Molina

Dante Molina se refirió a la lista de candidatos a dirigir a Patronato y la intención es que el nuevo DT llegue cuanto antes.

Gabriel Heinze

Gabriel Heinze visitó Crespo y miró el clásico en Sub 17 por la Liga de Paraná Campaña.

Tomás de Rocamora

La Liga Nacional Femenina de Básquet dejó un saldo por demás positivo para Tomás de Rocamora de Concepción del Uruguay.

Marcelo Candia

Marcelo Candia, entrenador interino de Patronato, analizó la caída frente a San Miguel. Foto: Canal 11.

Werner

El paranaense Mariano Werner homenajeará a Ayrton Senna en la carrera de este fin de semana en Termas de Río Hondo.

Boca

En Asunción, Boca le ganó a Sportivo Trinidense y se acomodó en su grupo de la Copa Sudamericana.

Talleres de Córdoba ganó en Córdoba con aporte del entrerriano Gustavo Bou

La "T" celebró en el estadio Mario Kempes frente a Barcelona de Ecuador.

Opinión

(de ANÁLISIS)
 

El Senado durante la sesión del 30 de abril. (Foto archivo)

Judiciales

Allende junto a sus abogados Rusconi y Lambruschini saliendo de Tribunales. (Foto: ANALISIS)

La Sala Penal del STJ estará integrada por los vocales Claudia Mizawak, Daniel Carubia y Miguel Giorgio.

Medina en una reunión que fue leída como otro movimiento contra Lijo.