La pandemia obligó a muchos cambios en la vida y en el fútbol, y uno de los que se adoptó en la Argentina fue la de quitar los descensos por dos años, para evitar que los problemas generados por el Coronavirus derivaran en mayores inconvenientes para las instituciones del fútbol nacional. Sin embargo, a partir de la actual Copa de la Liga Profesional, los puntos vuelven a contar, porque el año que viene volverá a haber pérdida de categoría.

En este marco, si bien todavía no tiene mayor trascendencia, lo cierto es que la tabla del promedio preocupa a más de uno y a esta altura de la temporada, son seis los equipos que tienen un promedio menor a uno y serían protagonistas hoy de la lucha por la permanencia.

Esos equipos son Sarmiento de Junín (0,600), Patronato (0,793), Platense (0,800), Godoy Cruz de Mendoza (0,862), Huracán (0,892) y Aldosivi de Mar del Plata (0,896). Y apenas por encima de ellos aparece Gimnasia y Esgrima La Plata (1,034).

Claro que hay un dato no menor: los dos recién ascendidos, el Kiwi y el Calamar, dividen por una menor cantidad de partidos, por lo que con un par de triunfos se escaparían rápido del fondo de la tabla.

Para los descensos falta un montón: ocho partidos del actual campeonato, 27 del segundo semestre -si se respeta esa idea de jugar todos contra todos- y otro tanto del año que viene, que todavía no tiene formato definido. Pero una prolongada mala racha en este comienzo de 2021 podría ser irreversible para cuando se definan las primeras pérdidas de categoría post pandemia.