El congreso de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (AGMER), que este viernes sesiona en Colón, abrirá con un escenario de incertidumbre: el miércoles, durante la reunión paritaria que se realizó en la Secretaría de Trabajo, ocurrió la presencia sorpresiva del ministro de Economía, Hugo Ballay, que llevó consigo una mala nueva: no habría propuesta salarial por cuanto se aguardará a conocer la inflación de octubre -el 15 de noviembre- y porque además aguardan definiciones del nuevo gobierno, que encabezará Rogelio Frigerio, en materia de aumento salarial.
AGMER hizo una evaluación de aquel encuentro y dijo que Ballay ratificó la propuesta de liquidar con los haberes de octubre un 7% por encima de la inflación acumulada a septiembre y además el anuncio de que habría nueva oferta en la nueva reunión del 15 de noviembre. “Esta fecha fue rechazada por nuestro sindicato, ante lo cual quedó planteado un cuarto intermedio sin fecha para pautar esa nueva reunión”, indicó el gremio.
En ese escenario, AGMER planteó que “se fijen porcentajes de adelantamiento de incremento a cuenta de cada uno de los meses del próximo trimestre, fijando nuevos porcentajes que deben proyectarse en función de la inflación real”; también, que “los incrementos que se otorguen prevean la equiparación de los salarios a la inflación de cada mes, estableciéndose, asimismo, un porcentaje por encima de dicha equiparación”; y mantener la paritaria abierta.
Del congreso que sesiona este viernes en Colón no se aguarda la adopción de medidas de fuerza, según relevaron Entre Ríos Ahora fuentes sindicales. “De las distintas asambleas escolares salen mandatos dispares por lo que es difícil que se adopte la realización de un paro en lo inmediato”, dijeron desde el gremio.
“Fue muy poco”, lo que se recibió en la reunión paritaria del miércoles, evalúa Víctor Hutt, dirigente de la seccional Uruguay de AGMER, especialista en salario docente. “Se mantuvo lo de la semana pasada, que es una oferta incompleta y muy diferente a los meses anteriores, diferente al formato que venimos sosteniendo desde hace varios meses”, añadió.
“Lo que hoy estaría faltando es el adelanto de inflación de octubre. En la reunión paritaria no se ofreció nada y es un retroceso de acuerdo a los meses anteriores”, apuntó.
Ese retroceso ya se puede medir. “Actualmente, con el salario docente estamos en un 69% del valor de la canasta que mide la línea de pobreza. O sea, nos falta un 30%. Eso es lo que nos falta conseguir de acá a futuro. Este año veníamos mejorando, o sea arrancamos estando en un 60% de la canasta y ahora hemos tocado el 70, o sea, vamos recuperando. Pero con esta oferta así incompleta volveríamos a retroceder. Eso es lo que nos está preocupando en estos últimos tres meses del año”, apuntó.
Con la última oferta salarial, un docente que trabaja cuatro horas diarias tiene un salario de $220.000 si está en el cargo testigo, maestro de grado sin antigüedad; si tiene extensión de jornada de primaria y trabaja cinco horas por día, el ingreso es de $255.700.
Pero el costo de la canasta que mide la línea de pobreza, según los datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) está en $319.422.