
El partido fue intenso y tuvo en los primeros minutos como dominador al dueño de casa. A partir del buen manejo del balón, avisó a los tres minutos con un centro de Marcolongo que demandó la intervención de Sebastián Bértoli para evitar que llegara Gabriel González.
Más allá del primer sofocón, el Rojinegro pudo acomodarse en el campo de juego haciendo circular la pelota, de la mano del virtuoso Gabriel Bustos. Una de las características positivas que mostró el elenco paranaense en el primer tiempo fueron las permanentes escaladas de Lucas Márquez y la movilidad de Leonardo Acosta.
Si bien tenía menor posesión de pelota, Douglas volvió a preocupar a la última línea Santa a los 17’ con un centro del Loco González que Aranda desvió ante la salida de Bértoli.
Con un traslado demasiado lento, casi anunciado, Patronato necesitaba de mayor participación de Patito Pérez, y solamente la cuota de fútbol del Chaca Bustos disimulaba un opaco rendimiento del visitante.
A los 30’ Carrasco tuvo la gran chance de marcar la apertura del marcador, pero su remate fue devuelto por el arquero Álvarez. Después pasó poco y nada y ambos se fueron al descanso.
En el segundo tiempo todo los buenos síntomas que había insinuado el Rojinegro en la primera etapa se esfumaron en un segundo tiempo para el olvido.
Cuando los equipos todavía no se habían acomodado en la cancha, un centro de Cabalucci dejó en evidencia un grave error defensivo del visitante: Bértoli quiso cortar el tiro de esquina, pero en el camino se molestó con Andrade y casi sin querer Gioda empujó la pelota al gol.
El tanto significó un golpe anímico para ambos equipos: el local dejó de lado las dudas para animarse a más. Por su parte, el conjunto paranaense no supo como trasladar la pelota en la mitad de la cancha. Salvo algunas apariciones esporádicas de Bustos, sumadas a las subidas de Márquez, la actuación en líneas generales resulto pobre.
Sin embargo, el empate llegó más rápido de lo esperado: el Rafa Márquez escaló por izquierda y con una exquisita habilitación dejó solo al Patito Pérez que puso el 1-1.
El empate invitaba a ilusionarse con una levantada del Santo, pero ello nunca sucedió, sobre todo porque el Rojinegro era previsible y contaba con un hombre de referencia de área en ofensiva.
Encima el Fogonero logró romper la paridad con un remate cruzado de Cabalucci que venció la estirada de Bértoli. Finalmente el equipo dirigido por la dupla Medero-Marini no aprobó el examen inicial y tendrá mucho que mejorar para enfrentar por la segunda fecha a Crucero del Norte en el estadio Grella, señala Uno.
Foto: Uno.