Olimpia-Recreativo
Fue un entretenido partido, al margen que no fue de alto vuelo. Cambiante, con mucha entrega, ágil y con un final caliente. Olimpia se recuperó con el tiro de final. Festejó con un doble de Gonzalo Benedetich en el último suspiró. Parecía que era para Recreativo, pero fue para el CAO por 66 a 64.
El primer tiempo tuvo un dominio repartido en las acciones. En el primer segmento jugó mejor Recreativo, en el segundo chico lo hizo Olimpia. En este marco, el partido siempre tuvo una dinámica por demás interesante, por lo que el pleito se hizo entretenido.
Recreativo sorprendió con buena resolución en ataque. Tuvo agresividad y encontró respuestas efectivas. Adentro complicó con Schonfeld-Ghiggi, dupla que fue importante para sacar la primera ventaja (17-9). El CAO entró dormido, en particular en defensa.
En busca de la reacción, con buen tino Marcelo Solanas paró una zona 2-3, defensa que le cambió la cara. De estar 24 a 16 abajo de repente metió un parcial de 15 a 3 que lo llevó a limar la desventaja y pasar al frente 31 a 27.
La ansiedad se apoderó de ambos equipos en el complemento. Recreativo levantó en el tercer cuarto. Defendió mejor y pudo correr. Olimpia no pudo sostener el buen trabajo realizado en el cuarto anterior y se apresuró más de la cuenta.
La visita entró al último parcial arriba 52 a 48. Y desde ya que se entusiasmó. Sin embargo, pecó de infantil y perdió pelotas importantes. La presión defensiva de Olimpia surtió efecto y a partir de ahí la recuperación.
Un par de buenas ofensivas puso al CAO otra vez al frente. El local se puso 63 a 58 a dos minutos del cierre. Pero lo desaprovechó. Un doble de Martínez y otro de Pacífico dejó el cierre 63 a 62. El Bochas recuperó la bola y le quedó una chance a 18 segundos. Ghiggi metió dos libres. Recreativo arriba 64 a 63 a 10 segundos. Heis probó un triple pero lo erró y Benedetich se la jugó y metió el doble y la falta para el triunfo, señala El Diario.
Sionista-Quique
El Centro transpiró más de la cuenta para vencer como local a un aguerrido Quique. Tras un primer tiempo, en el que el Decano pudo compensar la desventaja técnica con una fuerte marca y el goleo de Gastón Borgobello (autor de 13 puntos en el cuarto inicial).
Tras el reinicio, Sioni mejoró su juego colectivo, controló la ofensiva de su rival y encontró en el pibe Egas la llave para abrir el aro de su oponente. Ya en el último segmento, los dirigidos por Eduardo Musante, mediante garra y presión en la defensa se pusieron a siete puntos abajo.
Sin embargo, con inteligencia y algún pitazo fallido de los jueces, el equipo de Santiago Vesco se quedó con el triunfo.
Estudiantes-Rowing
El CAE tuvo un buen arranque. En el inicio mismo se puso al frente con un par de corridas y el tercer triple de Facundo Abasto (26 a 12). En el segundo chico, el dueño de casa, en base a las mismas armas, se siguió alejando hasta sacar una luz de 38 a 16. Rowing estuvo desprolijo y poco efectivo. Cayó al concluir la primera parte por un claro 23 a 50.
En el reinicio, la visita no se entregó y le puso ganas. De estar abajo 50 a 30 de repente achicó el tanteador en el cierre del tercer cuarto para entusiasmarse. Fue 59 a 43. A pesar de ello, en el último, cuarto Estudiantes volvió a ser el del primero y en cinco minutos pasó a ganar 71 a 49, definiendo el duelo con tranquilidad y autoridad, además de quedarse con el clásico del Parque.
Atlético María Grande-Patronato
Después de un primer tiempo peleado y parejo, Atlético María Grande mejoró en el complemento, tuvo personalidad y controló bien a Patronato para lograr una merecida victoria por 76 a 64.
El elenco de Daniel Sánchez fue de menor a mayor y de este modo pudo detener a su rival y sumar una victoria que bien lo ubica en las posiciones. La clave de la victoria estuvo en el tercer cuarto, segmento en el cual el local pudo distanciarse de su oponente. Esa ventaja lograda le sirvió para entrar más tranquilo al último chico.
Si bien Patronato intentó reaccionar, no estuvo fino en su intento. Atlético encontró la manera de conservarse en ganador y de este modo se aseguró la sonrisa.
