Igualmente, señaló que "lo que está haciendo la dirigencia de las entidades rurales es un relato que manifiesta cierta sorpresa, de un impuesto que fue establecido por una ley en el año 2009, por lo que estaban al tanto de que llegaba el momento de pagar la totalidad de un tributo que se fue prorrogando en etapas a pedido de ellos mismos".
En ese orden, a través de un comunicado enviado a ANALISIS DIGITAL, considero que hay “un discurso falaz con el que se pretende esconder una actitud bastante recurrente de estos sectores de no cumplir con las leyes”. Y agregó que esta política fiscal consiste en “el aporte económico que hace cada uno de los sectores para poder sostener las políticas públicas, el funcionamiento del Estado. De manera que también manifiesta un egoísmo que constituye una característica de esos sectores”.
En consecuencia, remarcó: "Me parece que hay dos cosas: por un lado, un discurso mentiroso; y por el otro, una actitud egoísta en el sentido de no querer contribuir con el sostenimiento de las políticas públicas".
Asimismo, hizo notar que "la situación no tiene nada que ver con el 2008. Me parece que están planteando el carácter confiscatorio de un impuesto, cuando no ha habido aumento recientemente. Son montos que estaban establecidos en una ley de 2009 que ellos mismos promovieron y que se fue prorrogando en el tiempo". Y advirtió que “están tergiversado los hechos y queriendo confundir, pero creo que la sociedad ya tiene claro cómo funciona esto. No se puede hablar de impuestazo”.
Finalmente, afirmó que “algunos pretenderán que los escenarios se parezcan al pasado, pero la sociedad va evolucionando, va conociendo la realidad y ahora creo que tienen todos claro de que lo que tienen que hacer es pagar el impuesto".