Como parte de los preparativos para la apertura definitiva del edificio del nuevo hospital Urquiza de Concepción del Uruguay, ayer estuvo en la ciudad un nuevo grupo de funcionarios para realizar las últimas revisiones del lugar. Juan Abolafia, secretario de Salud de la Provincia, junto al ingeniero Luis Rodríguez de la Unidad Ejecutora Provincial, mantuvieron contactos con directivos y personal del nosocomio.

“Venimos a chequear cuál es el estado de avance de los trabajos para que los especialistas evalúen los tiempos del traslado y el gobernador disponga de una fecha cierta para la apertura definitiva del nosocomio”, sostuvo Abolafia en contacto con Uno, cerrando la idea de que “lo más probable es que sea durante octubre”.

Según lo manifestado por Abolafia, el contacto con el director del hospital Urquiza, Sergio Bertelotti, es permanente y está al tanto de todo lo que sucede en Concepción del Uruguay para llevar un control de las situaciones problemáticas y los avances en los trabajos que se realizan.

El secretario de Salud entrerriano llegó por la mañana a Concepción del Uruguay y luego de un encuentro con Bertellotti se dedicó a mantener encuentros con el personal de salud de los diferentes grupos de trabajo del hospital. “Con el personal de enfermería hemos tenido una larga reunión donde se han expuesto diferentes temas, entre los cuales hay algunos problemas a los que trataremos de encontrarles solución”, dijo.

Continúa la capacitación

Si bien aún no se arriesga una fecha definitiva para la apertura total del nosocomio, los trabajos de capacitación y ambientación del personal se continúan realizando todas las semanas y afectan a distintas áreas.

“Esta semana hemos trabajado con las guardias, Quirófano y Consultorios externos”, afirmó Bertelotti, y aseguró que se espera que se vayan entregando los distintos sectores que hoy están vedados al ingreso del personal de salud, para comenzar a organizar cada área e iniciar las pruebas en vacío, necesarias para evaluar el comportamiento del personal y el equipamiento antes de abrir la atención al público.

“En este momento estamos por comenzar la etapa de habilitación de todo lo que es estructura y equipamiento. Ésta es una tarea que definirá la gente de la Unidad Ejecutora Provincial que comienza hoy (por ayer) a realizar las evaluaciones de cada caso”, afirmó el director.

El hospital Justo José de Urquiza tiene un plantel actual de trabajadores que involucra a 416 personas, las cuales ya vienen realizando, cada una en su sector, tareas de capacitación para la nueva estructura que será el escenario de su labor.

La capacitación del personal no sólo involucra el conocimiento del nuevo equipamiento por parte del personal; también hay sectores que tendrán a su cargo nuevas formas de trabajo que marcarán pautas distintas a las actuales.

Los cambios

Según las estimaciones realizadas por los responsables de Salud, el nuevo nosocomio involucra una serie de tareas que harán necesaria una cantidad complementaria de personal de acuerdo al área de trabajo. “Si bien aún no hay números definitivos, sabemos que será necesario incorporar más personal en sectores como enfermería y mantenimiento”, destacó Bertelotti.

El secretario de Salud recorrió las instalaciones y verificó la prestación de los servicios que ya se brindan en el sector habilitado del edificio.

Sobre la tarde de ayer la recorrida sumó a representantes de la UEP, que verificaron in situ la situación de las áreas sujetas a modificaciones edilicias que han demorado la entrega del nosocomio a las autoridades provinciales.

Cobertura de alcance regional

La importancia del hospital uruguayense adquiere una dimensión regional habida cuenta de la cobertura que brinda atendiendo casos de una amplia zona de la costa del Uruguay.
Actualmente se están haciendo cerca de 15.000 consultas ambulatorias por mes en todas las especialidades, lo que da una pauta de la magnitud de la atención brindada.

Actualmente se realizan unas 400 internaciones mensuales, lo que habla de un grado prestacional de gran calidad que se verá incrementado con el funcionamiento en el nuevo edificio donde se contará con un total de 130 camas.

El presupuesto con que se maneja el nosocomio en el viejo edificio y con la estructura actual ronda los 213.000 pesos mensuales, a lo que se suman unos 60.000 que ingresan en concepto de arancelamiento; esto es el dinero que se les cobra a las obras sociales por la atención de sus afiliados en el hospital público.

El moderno equipamiento y la calidad de las nuevas instalaciones avizoran un horizonte de excelencia en la atención, cualidad que hoy no pueden disfrutar las miles de personas que se atienden diariamente en el vetusto edificio, mientras se finalizan los detalles del nuevo hospital que lleva seis años a la espera de una decisión política que marque su apertura definitiva.

Historia de dilaciones

Cabe recordar que el Urquiza fue inaugurado oficialmente en 1999 y permaneció cerrado durante los cuatro años de la gestión de Sergio Montiel. Esta pérdida de tiempo fue en detrimento del estado edilicio del lugar y complicó la situación contractual con Benito Roggio, la empresa constructora del hospital, que vio dilatado los plazos de pago durante años.

La renegociación de la deuda global con la constructora demandó largos meses de tramitación y reuniones para llegar a una habilitación parcial que es la que hoy permite el funcionamiento de consultorios externos en varias especialidades.