En el marco del ciclo de charlas Patria Grande, organizado por el Ministerio de Cultura y Comunicación, Alfredo Zaiat presentará su libro “Economía a contramano”. El encuentro, donde se podrá intercambiar ideas con el autor, se realizará este lunes a partir de las 20 en el Centro Cultural y de Convenciones La Vieja Usina.
En esta obra, el autor interpela los postulados más convencionales para poder entender cómo los procesos políticos de la Argentina transitan por la economía, no como modelos, sino como proyectos de país. Interrogantes como ¿por qué los economistas son considerados gurúes?, ¿por qué los argentinos insisten en comprar dólares?, ¿qué nos muestran y qué nos ocultan las estadísticas?, ¿quién se va favorecido cuando se simplifica el problema de la inflación? ¿cómo y quiénes consolidan el poder financiero?, ¿cuál es el rol del Estado en la economía? y ¿La Argentina tiene una burguesía fallida?, forman parte de “Economía a contramano”.
Zaiat explica que “desmitificar discursos o conceptos económicos instalados en la sociedad, tiene un objetivo simple, evitar que la población sea engañada, que tenga un pensamiento crítico, pueda interpretar información e intervenir en el debate económico sin los preconceptos instalados por el neoliberalismo”. Por otra parte, sostiene que las posiciones que defiende “no son nuevas. Lo que pasa es que el proceso político local y regional hizo que estas posturas estuvieran en la agenda pública y por eso hoy tienen mucha más visibilidad”.
Respecto a uno de los temas más debatidos, los aumentos de precios, el periodista señala que “no es el único ni el principal problema de la economía” y remarca que “el Estado no es el responsable de esto. Ese es otro mito. Los conservadores dicen que hay tres factores que indicen, la emisión monetaria, el gasto público y el aumento de salarios. En los dos primeros le echan toda la culpa al Estado y en el tercero dicen que la es compartida con los sindicatos, que piden mucho aumento. Sin embargo existe un tercer sujeto social que los ortodoxos no incluyen en este debate, el empresario”.
En ese sentido, los argumentos de Zaiat se enmarcan en un factor estructural vinculado al proceso de desindustrialización sufrido en la última dictadura y una producción agropecuaria con mayor desarrollo. Según su punto de vista “ese desequilibrio genera tensiones en núcleos importantes de las cadenas productivas, ya que es necesario importar insumos cuyos precios son internacionales y la suba de esos precios indice en el precio local. Ahí es importante la intervención del Estado con las retenciones, para desacoplar el precio internacional del local”.
Otro de los factores que según el periodista inciden en la inflación, es que la tensión “entre el empresario que busca preservar sus tasas de ganancia y el trabajador que intenta recuperar su poder adquisitivo”. Asimismo, destaca que en Argentina “hay mercados concentrados y existen abusos de esas posiciones dominantes que tienen grandes empresas en productos sensibles de canasta básica familiar. Todo proyecto de inclusión social tiene una base inflacionaria y por eso es necesario realizar negociaciones para que hayan precios accesibles”, recalca.