"La invitación vino a través del actual secretario de Cultura, Alfredo Ibarrola, con quien hemos compartido tareas en artísticas en muchas ocasiones. Me hizo la propuesta en sintonía con la actual expresión política", destaco el funcionario.
Para el director, hombre de teatro reconocido, la de ahora "es una función compleja, considerando que es un edificio que contiene parte de la historia de nuestro país y han pasado por este espacio -cuando Entre Ríos era una isla-, actores que dieron origen al cine, al teatro, la radio y la televisión nacional".
El edificio tiene 103 años y a partir de su declaración como Monumento Histórico Nacional, en 2008, recibió especial consideración para su conservación. Sin embargo, durante la gestión del saliente director, Rodolfo Romero, el lugar perdió su brillo habitual: goteras en los techos del escenario y de la sala y aspecto de abandono en general son visibles a simple vista.
En diálogo con AIM Digital, Clavenzani señaló que "las condiciones edilicias son complejas; hice una primer recorrida con encargados de sala y mantenimiento y el lugar requiere una cirugía acorde a la magnitud del edificio, desde su historia y su construcción".
Además, el funcionario agregó que "partiendo desde la base, si el techo no funciona es difícil que puedas sostener otros tipos de muebles e inmuebles. El desmejoramiento se nota a simple vista y requiere una mano de obra profunda".
Por eso, aseguró, la nueva gestión municipal lo tiene "como prioridad en lo que hace a la obra pública, sobre todo por nuestro patrimonio histórico, aunque también hay que profundizar aspectos de equipamiento, para que funcione acorde a la envergadura de la programación".
Consultado respecto de las condiciones en las que encuentra el lugar, si se debe a falta de fondos o desidia del funcionario responsable anterior, el director consideró que "ambas cosas tienen que ver cuando un edificio muestra una decadencia notable y no se han visto cambios sustanciales".
Por ello, manifestó que "ambas cuestiones, mal manejo y falta de fondos; las dos cosas convergen, porque a este Teatro muchas cosas llegan en virtud que es uno de los pocos edificios considerado patrimonio histórico nacional".
Esa declaración de Monumento Histórico Nacional, agregó, "fue un trabajo que nos llevó cuatro años, arribó en 2008 luego de un intenso trabajo que hicimos con el equipo de empleados, pasantes y trabajadores del área de Cultura de aquel momento". Aquella tarea, explicó, "me permitió conocer los planos originales en Catastro, los circuitos internos, las bajadas de tensión, entre otros aspectos".
Personal en el Teatro
Consultado sobre los trabajadores que quedan en el edificio de la gestión saliente, manifestó: "hay personal conocido por la ciudadanía, de carrera y con más de 30 años dentro del Teatro que conoce muy bien la administración, luminotecnia o mantenimiento". Sin embargo, "se produjeron muchas incorporaciones nuevas y estamos viendo la función que cumplen y el deseo de aprender que pueden mostrar para lograr una continuidad en la misma unidad".
En lo posible, aclaró, "tratamos que las personas que estén en este espacio demuestren interés en permanecer". En los cuatro años anteriores "cursos de capacitación no hubo ninguno, ni de parte del sindicato ni del municipio. Para que un empleado defienda una tarea tan importante, servir a la comunidad de manera directa, es importante la capacitación en virtud que le va a dar jerarquía a si mismo, y además cumple un servicio que requiere mucha dedicación".
Clavenzani expresó que el cargo "es un desafío enorme independientemente del conocimiento que uno pueda tener. Me siento como elegido al hecho de que hayan pensado en mí para nuevamente coordinar este Teatro; así que eso me carga responsabilidad. Trataré de avanzar y gestionar acorde a la envergadura de este edificio, como merece nuestra ciudad".