Difícil era que Nicolás Agasse siga en Olimpia. Es que su crecimiento como jugador en los últimos años no solamente derivó en sus reiteradas convocatorias a las preselecciones argentinas, sino que temporada tras temporada, desde Sionista insistían con tenerlo entre sus filas ya que cuenta con todas las condiciones para ser un futuro basquetbolista profesional, señala El Diario.
—Llegó la hora de partir. ¿Que pasa por tu cabeza?
—Sabía que algún día me tenía que ir del club si quería progresar en mi carrera y llegó ese día. Pasan muchas cosas por la cabeza. Muchos sentimientos encontrados. Por un lado estoy contento por esta nueva oportunidad y muy ilusionado, pero por el otro medio angustiado porque dejo al club de mis amores, donde pase toda mi infancia y en el cual tengo la mayoría de mis amigos y miles de recuerdos. Insisto, estoy ilusionado y contento por lo que se viene.
—Hace años se habla de esta posibilidad. ¿Por que recién se da ahora y no antes?
—Creo que por un tema de no quemar etapas. En el club no había llegado a mi techo y me quedaba mucho por aprender todavía y, prácticamente, era lo mismo ir a Sionista y jugar en las inferiores, que estar en las inferiores de Olimpia. O sea, era la misma competencia y es más que obvio que no me gusta jugar contra Olimpia. Hoy en día la cosa cambio. Crecí un poco más, me fui desarrollando más como jugador y ahora quiero probar con jugar la Liga. Todavía me falta seguir aprendiendo cosas ya que no me desarrollé del todo. Sin embargo, con el hecho de entrenar con jugadores con tanta experiencia todos los días se aprende algo nuevo, más que nada es por eso que no se dio antes. Sionista siempre fue mi prioridad porque esta en mi ciudad y porque es un club que hace bien las cosas.
—¿Que te dijo Sebastián Svetliza?
—No he tenido la oportunidad de hablar con él. Pero se que le gusta mi juego por charlas que hemos tenido en años anteriores. Trabajando duro, día a día espero cumplir con sus expectativas.
—Superaste un año complicado, después de la lesión, y tuviste un premio con este pase a Sionista y la chance de soñar con el Mundial U19.
—Sí, la verdad que tuve un año complicado con la lesión (rodilla). Fue todo un tema para mí. Me deprimí mucho ya que me pasó en uno de los mejores momentos de mi carrera pero por suerte con mucho sacrificio y paciencia lo pude superar. Recién hace dos meses que volví a las canchas y todavía me falta agarrar un poco más de ritmo. Pero me siento bien con la pierna y eso es lo importante. Con respecto a la selección, estoy muy agradecido al cuerpo técnico por haberme dado otra oportunidad. Muchos chicos quieren estar en ese lugar y yo soy uno de esos afortunados. Tengo muchas ilusiones y la cabeza tranquila porque hay un muy buen nivel y esta complicado quedar. Voy a brindar todo lo que este a mi alcance para poder vestir la camiseta de la Argentina nuevamente.