La situación no reviste misterios. Si Racing le gana a Quilmes, Independiente, por más que pierda el sábado ante Estudiantes de La Plata, superará al equipo Cervecero en la tabla de promedios, con 1.144 de coeficiente contra 1.142.

A partir de ese dato, no quedan dudas, Racing podría ayudar y mucho a Independiente ganando y ello motivó una enorme repercusión entre los hinchas. Algunos simpatizantes quieren que su equipo triunfe por más que beneficie al enemigo deportivo y por otro lado existen aquellos que desean una derrota para acercar al Rojo al abismo.

El domingo pasado, cuando Racing igualó de local ante Godoy Cruz, parte de la hinchada arrojó unos panfletos en los cuales les sugerían a los jugadores que no le ganen a Quilmes.

No obstante, Racing en esta temporada ayudó y mucho a Independiente por haberle ganado los dos partidos a San Martín de San Juan, Argentinos Juniors y San Lorenzo, que ahora ha mejorado, pero en el inicio de la temporada también sufrió con el promedio.

Las sospechas, desalentadas por los jugadores de Racing, que afirmaron que es una ofensa que se dude de su integridad profesional, no toman en cuenta la mediocre actualidad del equipo.

Racing, que apenas ganó cinco partidos de 15, con un famélico 44 por ciento de eficacia, apenas busca conformarse con ingresar en la Copa Sudamericana, hecho que concretaría en caso de vencer y de no ganar Colón y Godoy Cruz.

Este Racing, que en todo el torneo no pudo ganar dos cotejos seguidos y para colmo no cuenta con su goledor Luciano Vieto (operado de una hernia), puede perder contra Quilmes o cualquier otro equipo.

El Cervecero sólo venció una vez en sus últimas cinco presentaciones y cuando parecía que estaba a salvo con el promedio, se complicó de nuevo. Igualmente, con ganar tres o cuatro puntos de los 12 que restan se asegurarán seguir en Primera División.

El mal de Quilmes pasa por la gran cantidad de lesionados que tiene. Sin ir más lejos, en la fecha pasada (derrota 2-1 ante Vélez) se le lesionaron Miguel Caneo (luxación en el codo derecho) e Ismael Quilez (distensión de ligamento de la rodilla izquierda). A ellos se les suma que el mediocampista ofensivo Fernando Elizari trabaja de manera diferenciada a causa de una contractura en el isquiotibial izquierdo, aunque llegaría en condiciones.

El que no podrá jugar en el equipo que dirige Omar De Felippe es el suspendido Sebastián Romero (acumuló cinco tarjetas amarillas). Por lo tanto, Cristian Menéndez irá por Caneo, Jacobo Mansilla por Romero y Germán Mandarino por Quilez, al tiempo que de no recuperarse Elizari, ingresaría Leandro Díaz.

Por lado de Racing, la duda del DT Luis Zubeldía, que aún no tiene asegurada su continuidad en el cargo, es el ingreso de Mario Bolatti por Diego Villar. El ex jugador de Huracán y Belgrano evolucionó favorablemente de una contractura en la cara posterior del muslo izquierdo y podría jugar.