De ANÁLISIS 

​En la mañana del sábado 4 de septiembre el Bar ubicado en el barrio Puerto Sánchez de la capital provincial, amaneció completamente destrozado. Escombros, roturas de moviliario; grasa y aceite en aberturas, mesas, barras y en el piso. Así lo denunciaba el colectivo de mujeres y disidencias que lo lleva adelante en las imágenes que con dolor compartían a través de las redes sociales.

Las imágenes eran acompañadas por un comunicado que detallaba la situación y señalaba como responsables a familiares de quien le alquila el lugar: una señora que tiene su casa frente al bar y que allí reside. "En Puerto Sánchez hay como una ley que rige sólo ahí, entre vecines, donde ocupan el pedacito de en frente de su casa, que es de playa. En este caso, Gloria -que es la señora que nos alquila a nosotras- construyó el deck con el chiringo y nunca lo usó para otros fines, siempre lo alquiló; construyó sobre un espacio público. Antes de Parientes había otro bar que se llamaba Sánchez y antes un cantobar. Nosotras llegamos a Puerto Sánchez porque había un cartel de Alquila. Entonces alquilamos el deck, hicimos un contrato con ella, que fue una decisión nuestra como para tener un resguardo ante cualquier situación, y que vence el año que viene", detalla a este medio, Natalia Rueda, una de las creadoras del proyecto. 

El Bar Cultural ubicado en el icónico barrio de Puerto Sánchez de la capital provincial amaneció destrozado. El grupo que lleva adelante el espacio autogestivo responsabiliza a quien le alquila el lugar. 

Denuncian destrozos y amenazas en Parientes del Bar

Pero ¿por qué la dueña querría echar de esa manera a quiénes le alquilan el mobiliario? La playa es pública. Es decir que, quien le alquila, no tiene un título sobre esa propiedad. "Nosotras alquilamos el deck, no el espacio", aclaran. "Cuando quisimos hacer los trámites en la Municipalidad para poder presentar papeles de habilitación del bar, al no tener un título de propiedad, nos pidieron un permiso de uso de la Municipalidad. Eso salió hace unos años y venció en pandemia, entonces empezamos a tramitar el siguiente, ya con un poco más de tiempo. Cuando el trámite llega al despacho del intendente para que sea la última firma, lo ve una persona que trabaja ahí, que es la hija de esta señora, y se genera todo un malentendido; lo tomaron como si queríamos pasarla por encima. Intentamos explicarle de muchas maneras; la primera reunión hablé yo y la segunda fuimos con Cony (Cullen), que el proyecto está a nuestro nombre. Pero no hubo forma, todo se empezó a desvirtuar y se volvió muy violento", asegura, Natalia Rueda. 

Amenazas y  denuncias 

“Saquen las cosas de acá”, "les voy a quemar el bar", "te voy a degollar", son algunas de las frases que denuncian haber recibido por parte de la dueña y su entorno. "Después de muchas amenazas hicimos la denuncia formal por amenazas y el sábado llegamos a la mañana y estaba todo destrozado. Desde hace tiempo que hostigan a las chicas que trabajan ahí; se meten con su sexualidad. El sábado tuvimos que tomar otras medidas porque tenemos mucho miedo por nuestra integridad física y por nuestro trabajo; son dos años y medio de ir construyendo este espacio", afirma Natalia Rueda. 

Por otro lado, desde las redes sociales, allegados y familiares de la señora que les alquila el deck lanzaron una serie de publicaciones en redes sociales señalándolas de violentas, mentirosas y que adeudaban el alquiler hacía unos meses. "Es totalmente mentira, nunca vamos a ir por el lado de la violencia. Parientes es cero violento. Pero entendemos que todas esas cosas van a decir. Recibimos una carta de desalojo de parte de ellos diciendo que nosotros debemos tres meses de alquiler y eso no es verdad. Dicen que nos aprovechamos de los derechos de la comunidad. Dicen muchas cosas pero nosotras tenemos un proyecto armado para habitar el espacio de otra forma", asegura Natalia Rueda. 

Cómo seguir

El sábado, Las Parientas, hicieron la denuncia ante la policía. Intentaron reconstruir los daños materiales y componer los espirituales y el domingo decidieron no abrir las puertas. "Ya intervino Fiscalía y en estos momentos ellos tienen una restricción", detalla Natalia Rueda. Pero, al existir esta restricción las dueñas del Bar Cultural no pueden ingresar a Puerto Sánchez ya que los agresores viven frente al bar. "Tenemos una guardia policial las 24 horas pero al vivir en frente y al tener una restricción no nos permiten a nosotras abrir. Entonces por ese lado nos perjudica muchísimo; van a tener que responder por los daños económicos causados y es una situación desesperante porque el bar es de autogestión, no tenemos capital guardado como para sostenernos. Lo nuestro es día a día. Tenemos una agenda cultural programada para todo el mes, o sea, que no solo somos nosotras, sino que hay muchas familias que no pueden trabajar. Todo el trabajo peligra por unos vecinos que no quieren llegar a un acuerdo", lamentan. 

. Las Parientas 

Parientes del Bar es un Bar Cultural que funciona en Puerto Sánchez desde fines del 2018. "Somos un Bar Cultural que propone y promueve el encuentro artístico, el disfrute y la identidad local en un ambiente natural propio de la cultura de río", se definen. Con el slogan La playa es de todes es que invitan a pasar a quien quiera gozar de ese paisaje. Feminista, disidente, aparece en la escena local como un lugar de pertenencia, de respeto y de fomento de las artes y las identidades más diversas.