Por Eduardo Anguita
(especial para ANALISIS)
El Ruso Enz se pasaba el día escribiendo y aunque lucía joven ya era un nombre en el periodismo de investigación. El Ruso tenía una confianza plena en ANÁLISIS y la contagiaba al resto: Sergio Ruiz, Antonio Tardelli, Luis María Serroels, César García y algunos otros.
Recuerdo que en las primeras reuniones había algo de custodia policial por las amenazas recibidas. Daniel era corresponsal de “Página/12” y había destapado algunas ollas sobre corrupción. Ahora, el propósito de ANÁLISIS era hacerlo con una revista que se editara y se imprimiera en Paraná y no sólo que llegara “de rebote” desde Buenos Aires. Por eso, cuando estaban los originales listos no sorprendió tanto –aunque dio una bronca bárbara- que la imprenta hiciera ¡ole! y dijera que no podían hacer el trabajo. Como un torbellino, uno salió a Santa Fe y consiguió un imprentero que la hiciera en tiempo récord. Así fue el primer número; parido con fórceps.
(Más información en la edición gráfica número 1000 de ANALISIS del día 11 de abril de 2014)