El diputado nacional Marcelo Casaretto (Frente de Todos – Entre Ríos) brindó detalles del proyecto de canje de deuda que ayer presentó el Presidente de la Nación.

En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), Casaretto recordó que “en 2003 el gobierno de Néstor Kirchner tuvo que encarar una negociación de la deuda en dos etapas: en 2005 se cierra el 76% de la deuda como canje y en 2010 se amplía llegando al 94%, pero luego (Mauricio) Macri hizo un acuerdo en 2016 y entra en un proceso de endeudamiento importante, con lo cual cuando asume (Alberto) Fernández se encuentra con una deuda de 313.000 millones de dólares, de los cuales 200.000 millones vencen en este periodo de gobierno de cuatro años”.

Agregó que “después de las PASO argentina se declaró en default porque al asumir una deuda hay que pagar el capital más los intereses en el plazo indicado y Macri decidió patear todos los vencimientos de agosto a diciembre para que cayeran en el gobierno entrante”. De este modo, explicó que “Argentina ya está es una especie de default desde agosto pasado y ahora lo que se busca es tratar de salir de esa situación estirando los plazos, bajando el capital y bajando la tasa de interés, y eso es lo que presentó ayer Alberto Fernández”.

Aclaró también que “hay vencimientos de deuda todos los meses pero hay bonos de legislación nacional en dólares y bonos de legislación extranjera en dólares, y Argentina está pagando algunos vencimientos de intereses pero hace bastante tiempo no está pagando capital con lo cual no hay un tiempo límite estrictamente. De hecho, los tenedores de bonos serían acreedores privados, son 68.000 millones de dólares y el que tiene un bono viejo no está cobrando, entonces lo que Argentina le plantea es cambiar ese bono viejo por uno nuevo, con estas condiciones y tres años de gracia para que Argentina pueda volver a crecer”.

Resumió que “es una combinación de quita de capital no muy alta porque son fondos de inversión y una quita de intereses muy alta, con estiramiento de los plazos” y aclaró que “el tema de los plazos anoche no se terminó de explicar y seguramente se conocerá hoy y creo que la propuesta estaría rondando un 45% del valor nominal”.

En cuanto a las formas de recaudación del país para poder hacer frente a estas obligaciones, el legislador indicó que “Alberto decidió prorrogar el presupuesto 2019 para este año y los intereses de la deuda afectaban alrededor del 25% del presupuesto nacional, con lo cual se fue transformando gradualmente en el rubro más importante del presupuesto. Argentina se financia con emisión monetaria, con impuestos y con las distintas fuentes que tiene, y en este caso con los recursos que tiene, debía sacar la cuarta parte para pagar sólo los intereses. De modo tal que los recursos para pagar la deuda salen del bolsillo de los argentinos”.

En este contexto, dijo que “Argentina antes de la emergencia de la pandemia ya venía de dos años de caída de la actividad económica y si a eso se le suma la crisis mundial por la pandemia, hoy podemos hablar de un 3 o 4 % de caída de PBI para este año, y ayer el FMI anunció que se estima que la economía nacional caerá el 5,5% o sea que será una crisis muy profunda, seguramente de características inéditas desde la década del ´30”.

Respecto de la situación de las provincias apuntó que “lo que venimos hablando es deuda nacional emitida en dólares bajo legislación extranjera, pero también hay muchas provincias, entre ellas Entre Ríos, que tienen deuda, y ayer el gobernador (Gustavo) Bordet planteó que una vez que se formalice esta propuesta y este acuerdo entre la Nación y los acreedores, hará una propuesta similar por la deuda provincial, lo cual es un dato muy importante”.

Por otra parte, advirtió que “el criterio del Presidente de la Nación es que no se emitan bonos provinciales, tipo cuasimonedas, ni tampoco que se emitan otro tipos de pagos o de bonos aunque sean de circulación limitada” y recordó que “Córdoba dio el puntapié inicial haciendo una emisión de bonos solo para el pago de sus proveedores e impuestos, pero no puede ser masivo”.

Destacó en este sentido que “el presidente no quiere bonos en la calle y por eso en la reunión anterior con los gobernadores comprometió 120.000 millones de pesos de fondos a las provincias: 60.000 millones en tres pagos de 20.000 millones como Aportes del Tesoro Nacional (ATN) no reintegrables, y otros 60.000 millones como créditos”.

En otro orden, respecto de la asistencia crediticia para las pymes, Casaretto analizó que “la inversión del gobierno nacional para superar esta pandemia está en torno al 2% del PBI, y sumando las distintas medidas está en 850.000 millones de pesos entre lo que va para pymes y para las familias más afectadas por esta crisis”.

Puntualizó que “en el caso de las pymes está la línea de créditos que es un mecanismo relativamente complejo que tiene que ver con los bancos y la regulación monetaria que hace el Banco Central, que les libera capacidad prestable para que puedan prestar al 24%, lo cual está disponible”.

Describió que “hoy el dinero para los créditos está, pero hoy ese dinero es de los bancos que lentamente se empiezan a adaptar y a dar disponibilidad a sus clientes de estos créditos, sobre todo para pagar sueldos. En ese marco, hay unas 600.000 pymes que está en condiciones de acceder a los créditos y no tienen mayores problemas, y de esas empresas que ya están calificadas algunas ya tomaron los créditos y otras todavía no porque prefirieron pagar los salarios con fondos propios”.

No obstante, mencionó que “hay otro grupo que están en el banco pero no tienen una calificación para tanto nivel de crédito, y para eso el gobierno ofreció un plan de garantías de segundo piso a través del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE)”.

Admitió que “el problema son las pymes que no tienen su operatoria de manera regular o que tienen empleados en negro” pero refirió que “en este momento de los 120.000 millones que se ofrecieron en créditos para las pymes se tomaron más o menos la mitad; unos 60.000 millones”.

En ese marco, anunció que “el lunes a las 17 se citó al ministro (de Desarrollo Productivo de la Nación, Matías) Kulfas para que de informes en la Cámara de Diputados y para buscar otra vuelta de rosca para que el Poder Ejecutivo y el Banco Central le ajusten un poco más las clavijas a los bancos para que los créditos puedan llegar y en definitiva la gente pueda cobrar, pero no es fácil”.