
“Repartimos alrededor de 10 mil volantes entre los automovilistas, mientras sonaba una cuerda de tambores, que se instaló en el medio de una plazoleta”, contó Cristina, una de las asambleístas presentes en la manifestación.
Según lo definió “fue un hito en la historia”, e incluso agradeció “la colaboración de la Gendarmería que nos ayudó a repartir los volantes”.
Durante la protesta se invitó a los automovilistas a realizar un “bocinazo” en repudio a la megaminería a cielo abierto.
(Uno)