El cuerpo fue encontrado por unos niños que jugaban en el lugar, zona en donde se instaló desde hace tiempo una “feria del trueque”, informó El Litoral.
“Inmediatamente fuimos a avisar a la garita de la Policía de Acción Táctica, que está acá nomás (a 100 metros), pero ahí no nos dieron bolilla. Tuvimos que llamar después con los teléfonos al 911, para que nos lleven el apunte. Parecía una criatura, muy menudita. Esto es un peligro, una verdadera boca de lobo. Hay pilas de tierra y basura. Encima, hace rato que la municipalidad no corta los yuyos y hay unos matorrales bárbaros. Antes nuestros chicos podían jugar acá y nosotros estábamos tranquilos, porque los veíamos. Ahora si se alejan un poco los perdemos de vista. Es un peligro”, se quejó María, quien se gana la vida vendiendo ropa en la feria.
La escena se llenó de patrulleros en contados minutos. Mientras peritos, personal de la Policía de Investigaciones y médicos forenses examinaban el lugar en busca de pruebas, gran cantidad de curiosos observaba desde atrás de la faja perimetral.
El cuerpo tenía evidentes signos de haber sufrido abuso sexual. Además, se presume que la muchacha fue asfixiada por el asesino. No obstante, estas cuestiones iban a ser determinadas con precisión durante la autopsia.
La policía trasladó desde el lugar a un hombre que dormía dentro de la estación. Además, los uniformados también buscan a otros tres sujetos que habitualmente pernoctaban allí.
Foto: El Litoral.