Meiszner comunicó que desde que comenzó la segunda etapa del plan de desarme voluntario, el lunes 4 de abril, en Paraná se recolectaron “alrededor de 300 armas”. A nivel nacional, se han inutilizado, en estos dos meses, 6.530 armas y 58.723 municiones.

“Paraná es la delegación Renar, nuestra boca fija de recepción”, explicó en diálogo con APF al tiempo que anticipó que “tenemos suscripto un convenio en Concordia con el intendente donde vamos a desarrollar el primer puesto móvil en esa ciudad a partir del 18 de julio y por 15 días”.

El funcionario precisó que ese mismo día “vamos a suscribir un convenio entre el gobernador y el ministro Alak. Nuestra intención es que la misma experiencia que vamos a tener en Concordia sea repetida en los distintos departamentos que tiene la provincia”.

“Entre Ríos es la segunda provincia con la cual conveníamos. La primera fue la provincia de Buenos Aires, donde estamos haciendo una experiencia muy parecida con los municipios”, comentó.

En esta segunda etapa, el director estimó “queremos hacerlo mas descentralizado en las provincias y dependemos de la voluntad política del gobernador y en este caso en Entre Ríos la hemos encontrado”. Y añadió: “Si vamos migrando por municipios con puesto móviles y podemos acceder al cien por ciento de los departamentos vamos a superar ampliamente todos los números de la primera etapa”.

Además del trabajo conjunto con provincias y municipios sostuvo: “Incorporamos a la concientización a los distintos cultos. Si uno no hace una tarea de concientización previa a la boca de recepción móvil no tiene sentido”.

Por último, sobre el objetivo del plan, el titular del Renar manifestó: “La realidad es que un arma menos en una casa es un riesgo menos”.

En este sentido, y según un informe realizado por la Dirección Nacional de Política Criminal, dependiente del Ministerio de Justicia, Seguridad y DD. HH en el año 2008, el 65 por ciento de los homicidios se da entre personas conocidas, familiares, vecinos, etc. Este dato da la pauta de que ese porcentaje de homicidios se da en conflictos interpersonales.

Cabe recordar que en la primera etapa se recibieron 107.761 armas y 774.679 municiones. Este número representa el 8.6 por ciento de las armas registradas en el país.

Las características del Programa Nacional de Entrega Voluntaria de Armas de Fuego son las siguientes: La ley que instituyó la segunda etapa del plan tiene dos años de duración. La entrega es anónima, porque no se exige presentación de documento de identidad ni para la entrega del arma ni para el cobro del incentivo.

Además, es voluntario porque pueden entregar sus armas todas las personas que así lo deseen, tengan o no credencial de legítimo usuario, sea que las armas estén registradas o no y del calibre y tipo que fueren. Tiene una remuneración a cambio, que dependiendo del tipo y calibre del arma varía entre los 200 y 600 pesos.

El pago se realiza con un cheque al portador, que puede cobrarse en cualquier sucursal del Banco Nación.

Las armas que se entregan se juntan y se destruyen todas juntas en un acto público. El resultado de la destrucción se funde y se dona a la Fundación del Hospital Garraham.

El teléfono para consultas es 0800 3 DESARME y la página web es http://www.desarmevoluntario.gov.ar.