Gervasoni ilustró sus dichos con fotografías, que acompañan el comunicado: “Las imágenes muestran el estado de la Escuela Rivadavia, que se entregó 'terminada' en noviembre del año pasado con humedades en el jardín y en la escalera de planta alta. También, en varias ocasiones, ya se quedaron sin agua. En condiciones similares se entregó la escuela secundaria Sarmiento de Paraná y otras tantas obras públicas, que con el apuro de campaña se entregan incompletas y en condiciones que muchas veces hacen que peligre la integridad física de todo el personal que trabaja en los establecimientos educativos”.