Lisandro Ruiz Moreno no seguirá en los Estados Unidos y volvió a la Argentina. El paranaense tomó esta determinación después de que la NCAA (National Collegiate Athletic Association) ratificara su decisión de no permitirle jugar en el básquet universitario por haber participado en una Liga profesional antes de ingresar a la universidad. La historia no le jugó a favor al joven basquetbolista y por ello decidió pegar la vuelta. Eso sí, aún no definió sobre su futuro. Seguirá jugando al básquet, aunque no sabe dónde.

Su vuelta a Paraná comenzó después de que la NCAA le impusiera una sanción de 73 partidos sin jugar, lo que equivale a estar dos temporadas sin acción (ya cumplió una). En los Estados Unidos hay una regla clara y contundente: la NCAA no admite jugadores que hayan estado en ligas profesionales antes de ingresar a la universidad. Como Ruiz Moreno jugó con Echagüe el Torneo Nacional de Ascenso (TNA), categoría profesional de nuestro básquet, los registros no lo favorecieron, por lo que el argentino no fue habilitado para ser parte de la competencia.

La Universidad de Rhode Island, mediante sus abogados, apeló esta sentencia, aunque fue con resultado negativo: “Unos días antes de venirme a Paraná tuvimos contacto con el Comité de la NCAA. Fue mediante una teleconferencia. Allí tuve que exponer y contar como fue mi paso por el TNA. Conté que en nuestro país el básquet no es como en los Estados Unidos, no se juega universitariamente sino con la Liga Nacional. Esa reunión duró una hora y media. La idea fue que entienda mi situación. El otro día, y ya estando en Paraná, me llamó mi entrenador y me dijo que la NCAA no iba a cambiar el fallo”, contó Lisandro, el menor de los Ruiz Moreno.

Si bien el objetivo del paranaense era estudiar y jugar en el país del norte, esta situación cambió totalmente el panorama. Ruiz Moreno no quiere dejar los libros pero hoy tiene como prioridad jugar al básquet: “Cuando venía en el avión estaba muy triste. Sentía que había fracasado, que había perdido el tiempo y no había podido cumplir con mi sueño de estudiar y jugar allá. Estando acá y gracias al apoyo de mi familia me di cuenta que para nada perdí el tiempo. Viví una experiencia increíble, muy enriquecedora. Hablé con Leo y él me dijo una frase que me quedó muy presente ‘yo no le tengo miedo al fracaso, sino a que no me den la oportunidad a fracasar’”.

En Estados Unidos el entrenador de la Universidad de Rhode Island y también sus amigos del equipo le pidieron a Lisandro que regrese y no abandone. Él, en cambio, ya tomó la firme decisión de regresar a la Argentina. Después de un largo tiempo en Kent School y un año en a Rhode Island, el joven paranaense le puso punto final a una experiencia “única”, como el mismo definió.

Su idea, ahora, es meterse de lleno en el básquet profesional. Entonces, ¿vuelve a Echagüe?: “Yo digo que me quedo en Argentina, no sé si en Paraná. En agosto quiero arrancar mi carrera como basquetbolista profesional. No creo que Echagüe sea el lugar. Si compra plaza del TNA puede ser, la voy a analizar. Igual, no creo. Necesito crecer, ganarme un lugar, hacerme conocer y pelearla. Acá en Echagüe entiendo que cumplí una etapa”, señaló al respecto.

Lisandro tiene 21 años y para el TNA sigue siendo ficha juvenil. “No quiero que el hincha de Echagüe me mal interprete. Para crecer necesito despegarme de lo que es mi club. Estoy muy entusiasmado, hace rato que no juego. Quiero demostrar todo lo que aprendí en estos dos años. Por eso en estos días voy a tener una charla con Leopoldo y vamos analizar los pasos a seguir. Hoy mi futuro es incierto. Lo único que sé es que quiero jugar al básquet”, confesó en declaraciones a El Diario.