“El interior, generador del crecimiento estos últimos años record, participa en forma menos activa. La cantidad de visitas y consultas en nuestras empresas sigue siendo muy intensa, pero las decisiones de compra se demoran, creando un mercado con altibajos”, explicó Príncipe. No obstante, el directivo sostuvo que “los autos siguen estando más baratos que muchos productos comerciales, por el bajo aumento de los precios en este último año, no sólo acá sino en el comparativo con los países limítrofes”.

El informe detalló que las provincias que más han crecido en venta de vehículos usados en los primeros siete meses del año son: Catamarca (9,1 por ciento), San Juan (8,6), San Luis (6,6), Corrientes (6,3) y Salta (6,3 por ciento). En cambio, los distritos donde la venta de autos usados cayó son: Santa Fe (-6,56 por ciento), Capital Federal (-5,96), Córdoba (-5,4), Misiones (-3,7), provincia de Buenos Aires (-3,6), Entre Ríos (-2,3) y Mendoza (-2,1 por ciento). Pese a ello, las provincias más grandes siguen concentrando el mayor porcentaje de las ventas totales. El mayor número de operaciones se concretó en territorio bonaerense, con 39 por ciento de las operaciones; seguida por Córdoba, con el 12 por ciento; la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con 10 por ciento, y Santa fe, con 9 por ciento.

El año pasado, la venta de usados fue de 1.833.642 unidades, un 18,7 por ciento más que en 2010, un record histórico. En 2002, en plena crisis económica, la venta fue de apenas 600 mil unidades. Luego el sector comenzó a recuperarse sin pausa hasta el año 2009, cuando retrocedió un 5,7 por ciento, sumando 1,3 millón, debido a la crisis internacional. En 2010, las ventas se recuperaron y cerraron con una suba de 16,2 por ciento, tendencia que se mantuvo en 2011; pero en lo que va de este año la situación empeoró nuevamente, aunque es importante destacar el piso alto con relación al que se está produciendo la baja en las ventas, publicó Página/12.