El ingeniero Abel Pesce, responsable del departamento de Geotermia de la República Argentina, manifestó que los estudios realizados determinaron que las perforaciones termales no perjudican el acuífero Guaraní. “Los entrerrianos deben quedarse muy tranquilos porque se están haciendo muy buenos proyectos desde el punto de vista de los usos directos de energía geotérmica, en baño terapia y en aplicaciones para consumo, lo que está generando un gran desarrollo y son muchas las familias que viven a expensas de los complejos termales”, afirmó.
Sobre la decisión del gobierno provincial de no autorizar mas perforaciones y ordenar la evaluación y confección de un mapa sobre el potencial geotérmico de Entre Ríos, que permitirá regular las instalaciones de nuevos complejos termales, el ingeniero Pesce dijo en declaraciones a FM Riel que “si el propósito es saber cuáles son los lugares termales de agua dulce y cuáles los de agua salada, cuáles los de mucha y poca producción, es muy buena la idea, pero refuto enérgicamente que la utilización del recurso termal donde el agua es salada, por lo que no se utiliza para consumo, puedan perjudicar al acuífero y contaminar”.
Según Pesce, el acuífero Guaraní es considerado uno de los reservorios de agua dulce subterránea más grandes del mundo y en Entre Ríos sólo se han realizado cuatro perforaciones, “una en Chajarí, otra en Federación, y dos en Concordia, que de ninguna manera pueden perjudicar la masa de agua dulce subterránea”, aseguró.
Sobre una reciente publicación periodística donde se asegura que la provincia puso un freno a la explotación masiva del recurso termal por posibles daños ambientales aseguró que “se opinado ligeramente sobre el tema”, y que “el acuífero se saliniza en la zona de Basavilbaso y esas aguas no son aptas para el consumo humano, pero como todo recurso natural hay que darles un uso y que ese uso genere desarrollo. Este recurso es para explotar y no para dejar indefinidamente en el subsuelo”, indicó Pesce.
Autoridades de la Dirección de Hidráulica de la provincia expresaron su temor sobre posibles daños ambientales al extraer a superficie aguas saladas. En ese sentido, el profesional dijo que “a medida que se vayan empapando en el tema se van a dar cuenta que en el mundo los recursos geotérmicos tienen tratamientos por los cuales se busca no perjudicar al resto del ecosistema, pero este tipo de medidas se toma una vez que se conoce que grado de salinidad que tienen las aguas”, concluyó.