La tensión que se vive en River, especialmente en lo hinchas, se trasladó a las adyacencias del Monumental. Un grupo de 400 simpatizantes millonarios cortaron la avenida Figueroa Alcorta para manifestarse y pedir “que se vayan todos”. Y terminaron chocando con la Policía. Además, hubo un ataque a la prensa presente en el lugar.

Al ritmo del “que se vayan todos”, los hinchas pidieron por las renuncias del presidente Daniel Passarella y del técnico Juan José López, ambos concentrados con el plantel en el Hindú Club de Don Torcuato.

“Esto es River, hay que dejar la vida”, fue la leyenda que se pudo ver en una bandera desplegada a lo largo de la calle, en clara alusión a los jugadores, que el miércoles fueron apretados dentro de la cancha por un grupo de barras, da cuenta Clarín.

En medio del clima tenso, un grupo agredió a periodistas que cubrían el banderazo, ante la inacción de los policías. Afortunadamente, el hecho no pasó a mayores. Pero luego, los hinchas quisieron entrar al club y se enfrentaron a la Policía, que dispersó a los violentos con camiones hidrantes.