Pero también hubo elementos a su favor -que otorgan parte de la responsabilidad en la Dirección de Vialidad Provincial-, como el estado de la calzada, un cordón que dividía ambas manos de la ruta que fue “mordido” por las ruedas del colectivo, y el pésimo estado de la señalización e iluminación de esa parte del acceso.
Según publicó Uno, en los últimos meses, desde que el caso fue elevado a juicio y se reunieron a las pruebas, la fiscal de Cámara Cecilia Goyeneche y el acusado, mediante sus defensores Leopoldo Lambruschini y Julio Federik, mantuvieron un diálogo que permitió llegar al acuerdo del juicio abreviado.
Este jueves, en el Juzgado Correccional N°1 de Paraná, se llevó a cabo la audiencia en la que Fagioli fue puesto en conocimiento de qué se trataba este tipo de juicio, y manifestó ante el juez Pablo Vírgala que aceptaba dicho acuerdo y el cumplimiento de la pena de tres años de prisión, de ejecución condicional, por el delito de Homicidio culposo y lesiones culposas. El chofer de la empresa radicada en San Justo, provincia de Santa Fe, aceptó además los cinco años de inhabilitación para conducir vehículos.
Vírgala analizará ahora la causa para realizar la sentencia, y en caso de definir una pena para Fagioli esta no podrá ser mayor a la ya acordada entre las partes.
El caso de la niña de 12 años
En el accidente hubo tres víctimas fatales y varios lesionados, pero uno de los casos fue el que más conmocionó a la sociedad. Milagros Girard tenía 12 años el día del hecho, y viajaba junto a sus hermanos y su mamá rumbo a Misiones. Cuando el colectivo volcó, cayó sobre la banquina y el guardarrail lo atravesó por dentro, de lado a lado. Como un filoso cuchillo, la chapa amputó los brazos de Milagros.
La nena y su familia juntaron fuerzas y reclamaron ante los gobiernos de Santa Fe y el nacional la ayuda necesaria para el mejor tratamiento que pueda recibir. De este modo, meses después Milagros viajó a Italia y volvió a su ciudad, Santa Fe, con las prótesis de brazos colocadas.
El trágico viaje por la ruta 12
El colectivo que protagonizó el accidente pertenecía a la empresa Norteño Tur, radicada en la ciudad de San Justo, provincia de Santa Fe. Aquel 12 de abril de 2006 por la noche viajaba desde esta localidad con destino a las Cataratas del Iguazú, como muchas familias lo hacen en Semana Santa.
Al transitar por la intersección del Acceso Norte de Paraná y la ruta nacional 12, el micro de doble piso, que viajaba con 53 pasajeros a bordo y dos choferes, habría entrado a alta velocidad en el rulo, y tras morder la banquina volcó al costado de la ruta.
La baranda metálica del guardarrail rompió los vidrios de las ventanas y entró en el colectivo como un cuchillo, y provocó profundas heridas cortantes y laceraciones en las víctimas, y hasta la mutilación de sus miembros.
(Foto: Uno)