El mandatario nacional comenzó la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso con un duro discurso donde realizó un detalle de la "herencia" recibida del kirchnerismo. "Tenemos que reconocer que no estamos bien", dijo Macri en sus primeras palabras. Sin referirse al kirchnerismo, sostuvo que "la brecha entre los argentinos" llevó al país a "enojos, resentimientos y búsqueda de enemigos, interno y externo".

En otro tramo de su discurso, el Presidente mencionó al ex mandatario Néstor Kirchner, ante la presencia de legisladores de todos los bloques, incluidos del Frente para la Victoria (FpV). "Hace 13 años el presidente Kirchner habló de la importancia de los superávit gemelos, pero eso después fue dejado de lado", manifestó.

Luego añadió: “Encontramos un Estado con dificultades para resolver sus principales responsabilidades. Más recursos no permitieron reducir los problemas estructurales de pobreza", señaló.

Más adelante remarcó que la inflación fue de 700 por ciento en los últimos años y culpó a la emisión monetaria. "El déficit del 7 por ciento del PBI es de uno de los mayores que tuvo el país. Esto sucedió mientras vivíamos unos de los momentos de mayor presión tributaria de la Historia", expresó.

Corrupción

"Encontramos un Estado plagado de clientelismo, de despilfarro y de corrupción. Un Estado que se puso al servicio de la militancia política y que destruyó el valor de la carrera pública ", criticó el mandatario.

"Mucho de esto se explica por la corrupción. Ocupamos el lugar 107 entre los 178 países del ranking de transparencia internacional, muy por debajo de Uruguay, Chile, México, Cuba, Brasil, Colombia y Bolivia", precisó el mandatario en su primer mensaje ante el Congreso.

"La corrupción mata, como lo demostró Cromagnon, Once y las rutas de la muerte. En cada área del gobierno hemos encontrado ejemplos de falta de transparencia, ineficiencia y en muchos casos, corrupción", diagnosticó el jefe de Estado.

Asimismo, planteó lo que será uno de los lineamientos de su gobierno: "La corrupción no debe ni puede quedar impune, debemos darle todas las herramientas al Poder Judicial, para que trabaje en forma independiente pero con tiempos veloces. Fortaleceremos la Oficina Anticorrupción, que encontramos desmantelada".

En otro tramo de su discurso, Macri ahondó sobre los proyectos concretos que se enviarán al Congreso para pelear contra la corrupción: "Para unir a los argentinos, debemos fortalecer nuestras instituciones, fortalecer la transparencia y los órganos de control. Promoveremos la rápida sanción de ley de acceso a la información pública, para que junto a la política de gobierno abierto, tengamos un Estado transparente. También necesitamos una nueva ley de compras públicas y desarrollo de proveedores, para romper los bolsones de corrupción y mejorar la eficiencia", lanzó.

Holdouts y deuda

El mandatario pidió al Congreso "conseguir los consensos necesarios" para conseguir el paquete de leyes que definirá la salida del país del default, luego del acuerdo alcanzado ayer con los holdouts. El gobierno en este momento necesita la derogación de las leyes cerrojo y de pago soberano para afrontar la cancelación definitiva de la deuda por 4.653 millones de dólares.

A las 11.49 le dio un corte a su primera parte del discurso. "Podría seguir todo el día, pero por respeto a quienes están siguiendo voy a cortar acá", dijo luego de 23 minutos en los que se dedicó sólo a hablar de la "herencia". Se comprometió a revelar "todos los datos desde 2003 hasta hoy".

Entonces dijo que el diagnóstico "no debe servir para deprimirnos ni enojarnos". Allí comenzó la segunda parte del discurso del Presidente, planteado con referencias al futuro.

"En estos casi 3 meses de gestión, trabajamos para normalizar nuestro país", apuntó. Luego inició una defensa cerrada a sus primeras medidas de gobierno, como el levantamiento del cepo al dólar y los cambios en Ganancias.

Dictadura y Nisman

El Presidente cosechó aplausos -y también algunas interrupciones- cuando hizo alusión a la última dictadura. "Este año se cumplen 40 años del golpe militar, cuando se consolidó la época más oscura de nuestra historia. Aprovechemos este año para gritar todos juntos nunca más a la violencia", aseguró.

Luego se vivieron momentos de tensión cuando prometió reducir la inflación y dijo que "la inflación la promovió el gobierno anterior". Allí sus palabras fueron interrumpidas por legisladores del Frente para la Victoria (Fpv) y la vicepresidenta Gabriela Michetti tuvo que pedir "silencio para respetar al Presidente".

Defendió el cambio que impulsó en el mínimo no imponible en Ganancias y dijo que la actualización en las escalas "deberá ser tratada por el Congreso lo antes posible".

Por otra parte, Macri le dio valor a las relaciones internacionales. Habló de los nuevos contactos que tuvo con países como Brasil, Estados Unidos y Francia y le otorgó un párrafo aparte a Gran Bretaña: "Como le dije al premier David Cameron, dialogar no implicar renunciar a nuestro reclamo sobre la soberanía de las Islas Malvinas".

También recordó al fiscal muerto Alberto Nisman y dijo que la circunstancias de su muerte "de a poco comienzan a aclararse". Y le dio su apoyo a las víctimas por el atentado a la AMIA.

”Agenda del Siglo XXI"

La última parte del discurso, Macri lo usó para trazar lo que llamó "agenda del Siglo XXI". Le pidió al Congreso aprobar el compromiso que asumió el gobierno sobre cambio climático en París y dijo que impulsará una ley para establecer la obligatoriedad de la educación desde los tres años. Adelantó además que llevará Internet "hasta al pueblito más alejado".

Prometió también la "devolución del IVA para los productos de la canasta básica alimentaria" y la “ampliación de la Asignación Universal por Hijo".

En ese momento le hizo un guiño a Elisa Carrió, socia de su gobierno. "Al finalizar mi gestión quiero que todos los niños reciban una asignación, proyecto de la doctora Carrió". Sobre los jubilados, adelantó: "Trabajaremos para normalizar lo pendiente y diseñar una respuesta al reclamo del 82 por ciento móvil".

Dijo que hace falta "reformar" el Consejo de la Magistratura y pidió aprobar los pliegos de Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrant. También anunció, como se esperaba, impulsar una ley del Arrepentido.

Asimismo, aseguró que buscará una "profunda reforma política" y recordó a Hipólito Yrigoyen, el primer presidente elegido por el voto, lo que significó un mensaje hacia el radicalismo, también aliando del Pro en Cambiemos.

Apostillas

El discurso de Macri también tuvo una dosis del humor. El jefe de Estado cometió un error y leyó dos veces la misma frase. Al darse cuenta del error, admitió sin problemas "esto ya lo leí". La confesión generó risas propias y algunas bromas de los legisladores opositores.

Si bien había una gran expectativa por la presencia de Máximo Kirchner, el hijo de la ex Presidenta, se quedó en el sur junto a su madre y a su tía. Quien sí estuvo en su banca fue el ex ministro de Economía, Axel Kicillof, principal blanco de muchas de las críticas del líder de Cambiemos.