Por Lautaro Gervasoni*
Son muchas las aristas por las cuales se puede abordar el tema Malvinas: una reseña de la historia de atropellos que Gran Bretaña ha hecho a los pueblos del mundo y al nuestro en particular, comenzando por las que estudiamos en la escuela, las Invasiones Inglesas; una reseña de todos los intentos que los distintos gobiernos argentinos han hecho por recuperar nuestras islas desde aquel fatídico 2 de enero de 1833; un repaso de cómo las distintas tradiciones historiográficas han abordado “la cuestión Malvinas”; una argumentación basada en los distintos criterios que nos dan la razón para recuperar nuestra soberanía, ya sean geográficos, geológicos, jurídicos, históricos; una análisis táctico de cómo se desarrolló el conflicto bélico en sí mismo, entre otros.
Sin embargo, lo que aquí nos interesa resaltar es el rol que tuvieron los entrerrianos en las grandes causas nacionales de nuestro país, y particularmente en Malvinas.
Es por esto que queremos dedicarles un párrafo a los héroes de nuestra tierra. Como no recordar entonces al primer argentino y entrerriano que se reveló contra el invasor inglés, cómo no recordar que en 1833 fue el Gaucho Rivero quien se batió en armas contra John Oslow, quien usurpaba nuestras islas. Fue aquel Gaucho heroico, nacido en Arroyo la China (hoy Concepción del Uruguay) que empezaría a escribir una de las páginas más gloriosas de nuestra historia, fue él mismo quien murió peleando en la Vuelta de Obligado el 20 de noviembre de 1845 defendiendo, una vez más, la Soberanía Nacional. Y fue aquel gaucho, el primer mártir entrerriano de una larga lista que llega hasta 1982, cuando aquella maldita guerra se llevó a 34 comprovincianos.
Por eso, en estas humildes pero sentidas líneas, queremos recordarlos para que su memoria siga abonando la larga lucha por la recuperación de los que nos pertenece. Como bien se detalla en una gran obra sobre el tema, editada por la Editorial de Entre Ríos, “Malvinas. Tributo entrerriano” de Mario Francisconi, en todas las Fuerzas que participaron de la guerra “hubo un entrerriano que generosamente brindo su vida, constituyendo a Entre Ríos en la única provincia argentina en brindar la vida de sus hijos en cada una de la fuerzas que luchó en aras de la definitiva integración nacional”. Y más adelante constata que el “ejército perdió 194 hombres en el conflicto, 8 de ellos entrerrianos; Armada sufrió 375 perdidas, 15 eran entrerrianos; Fuerza Aérea perdió 55 hombres, 5 eran entrerrianos; Prefectura a 2 hombres, uno de ellos entrerriano; Gendarmería a 7 hombres, 2 de ellos entrerrianos y Marina Mercante perdió 16 hombres, 3 de ellos entrerrianos”.
También nos parece importante destacar el rol de la juventud como actor político y social que a lo largo de nuestra historia ha protagonizado los grandes acontecimientos, desde la Revolución de Mayo, en las jóvenes figuras de Moreno y Belgrano, solo por citar los más destacados, hasta el tema que nos convoca en esta nota: Malvinas.
En esta línea creemos necesario recordar especialmente a Juan Ramón Turano, el entrerriano más joven que murió en tierras malvineras. Y en él recordamos a todos los jóvenes que murieron defendiendo nuestra soberanía. Por eso consideramos fundamental recordarlos y ubicarlos en el lugar que se merecen en nuestra historia. Por otro lado, este ejercicio de la memoria, que siempre es colectivo, debe hacernos reflexionar sobre el rol que debemos asumir en este presente lleno esperanzas. Afortunadamente, vivimos en una democracia que día a día se fortalece más y más. Por lo tanto son otras las condiciones que tenemos a diferencia del contexto de gestación de la guerra, donde una dictadura, la peor de nuestra historia, en plena decadencia usufructuó un tema tan sensible a los argentinos para intentar perpetuarse en el poder. Decidió mandar al frente de batalla, en forma irresponsable, a soldados sin las más mínimas condiciones.
Creemos importante reflexionar acerca de cuál es nuestro rol como jóvenes en esta etapa histórica con respecto al tema Malvinas. Nosotros entendemos que nuestro rol es el seguir profundizando el reclamo por vía pacífica y comprometiéndonos todos los días con la Integración Latinoamericana, con la convicción de que de esta situación se sale fortaleciendo la unidad continental, puesto que lo de Malvinas dejó de ser un tema simplemente nacional para convertirse en una causa de la Patria Grande. Muestra cabal de esto es el sólido respaldo de todos los países de América Latina a nuestro país, principal impulsor de la integración, y el categórico rechazo a las actividades ilegales del Reino Unido en materia militar y las relacionadas con la exploración y explotación de los recursos naturales renovables y no renovables.
Debemos aprender de las lecciones de la historia, que es sabia. Debemos ejercer la memoria para recordar a nuestros hermanos caídos y debemos apoyar sin claudicaciones al gobierno nacional en sus reclamos pacíficos ante la comunidad internacional.
Las Malvinas son argentinas, nuestros héroes también. Nuestro humilde homenaje a ellos y nuestro compromiso de nunca bajar los brazos hasta recuperar lo que es nuestro. Y aunque sea extremadamente difícil nuestro objetivo, dada la potencia militar y la capacidad diplomática de los usurpadores de nuestra tierra, no debemos olvidar que nunca, se hubiera conseguido lo que hoy es posible, sino no nos hubiéramos arrojado decididamente en la búsqueda de lo imposible.
*Secretario provincial de Juventud.