La última semana, y luego de algunos movimientos, cambiaron las relaciones entre las fuerzas opositoras. Los radicales que habían sido los primeros en sentarse a conversar con la agrupación La Pancho Ramírez, hoy son quienes más lejos están de acordar con Alfredo De Angeli. Un encuentro en Capital Federal enterró la posibilidad de que el ruralista baje su candidatura a senador y se quede con la primera diputación, como ofreció el congreso radical que encabeza el sector del precandidato a senador, Atilio Benedetti. La posición esgrimida en Buenos Aires no surge de una opinión unánime en Propuesta Republicana (Pro). Armando Saliva, presente en el cónclave del que participó el estratega Emilio Monzó, dio un paso al costado de la conducción partidaria luego del encuentro. Se quejó de los criterios manifestados para conformar un frente con la Unión Cívica Radical (UCR).
Unidos por Entre Ríos; que incluye al Frente Entrerriano Federal, Nuevo Espacio y el Partido Popular de la Reconstrucción; miró desde afuera las negociaciones entre el radicalismo y De Ángeli. Desde el centenario partido y La Pancho Ramírez se tiraron con encuestas para ver quien convencía al otro de resignar la senaduría. Parece no haber servido de nada. Mostrar números de un trabajo de opinión pública es una herramienta de la política en el marco de negociaciones para cerrar un acuerdo o para convencer al electorado en vísperas de una elección. Nada nuevo en el pequeño círculo de la política que lee esa información.
En el frente que tiene como referentes a Jorge Busti, Luis Leissa y Emilio Martínez Garbino, nunca dejó de haber diálogo con el presidente de Federación Agraria. No exigir el primer senador en la propuesta electoral se convirtió en una virtud. El ex gobernador, desde un principio, dijo estar en una etapa política de militancia y acompañamiento. Martínez Garbino acaba de autoexcluirse en declaraciones radiales. Vuelve a garabatearse el viejo machete que ponía a De Ángeli como candidato a senador; y Leissa y Cristina Cremer como diputados.
Durante el fin de semana, dirigentes de la UCR, el bustismo y cercanos a De Ángeli que están en las negociaciones no quisieron hablar ni adelantar nada. La semana empieza con un radicalismo más cerca de pelear con la Lista 3 y Unidos por Entre Ríos de cerrar con el ruralista, publicó Página Política.
El Partido Socialista y Generación para un Encuentro Nacional (GEN) ya cerraron un acuerdo que también incluye lo que queda de Proyecto Sur y sectores de izquierda. Todos confluirán en el Frente Amplio Progresista (FAP). La pelea en ese espacio es por las candidaturas. Suenan nombres, pero nada más que eso, suenan. Esta es, a tres días del cierre, la foto de las fuerzas de la oposición.