La Albiroja y la Vinotinto brindaron un gran espectáculo y lo hicieron a pesar del pésimo estado del campo. Sin presiones, jugaron como si se tratase de una final y regalaron uno de los mejores encuentros de una deslucida Copa América. No hubo un equipo dominador, sino que se alternaron el control de la pelota y generaron situaciones con maniobras elaboradas.
El combinado de Farías fue el primero en aproximarse con un buen zurdazo de Maldonado que se fue apenas arriba del travesaño. El seleccionado de Markarián respondió con una estupenda acción de ataque y el arquero Vega le ahogó el grito a Chiroque. Un rato más tarde, Fedor giró bien dentro del área y Fernández mandó el balón al tiro de esquina.
Cuando parecía que el primer tiempo culminaba sin goles, llegó el tanto de Perú, que aprovechó al máximo un descuido de Seijas en la salida. Recuperó la pelota Chiroque, asistió a Guerrero y éste remató cruzado, asistiendo involuntariamente a Chiroque, quien definió solo entrando por el segundo palo.
La segunda parte arrancó con la misma intensidad con la primera mitad. Venezuela se lanzó en busca del empate y casi lo consigue en la primera jugada: Fedor apiló rivales en el área y sacó un disparo rasante que salió al lado del poste derecho. Con el correr de los minutos, Perú se acomodó y se agigantó la figura de Guerrero.
Encima, la Vinotinto se quedó con un jugador menos a los 13 minutos por una inapropiada infracción de Rincón a Lobatón. El equipo de Markarián entendió que era el momento de apretar el acelerador y a los 18 amplió la ventaja gracias a Guerrero, quien combinó con Chiroque en el área y le rompió el arco a Vega.
Daba la sensación que el encuentro estaba liquidado, sin embargo, el conjunto de Farías sacó a relucir su amor propio y se puso a tiro a los 32 minutos con el gol de Arango, quien recibió un gran pase de Orozco y resolvió con simpleza. A los 37, Venezuela tuvo una gran chance para igualar: Arango ejecutó un potente tiro libre, Fernández dio rebote y Cichero no pudo empujar la pelota al fondo de la red.
Perú aguantó como pudo y sentenció el partido a los 44 minutos con una brillante acción de Guerrero, quien dominó el balón con mucha categoría y clavó un derechazo cruzado. A los 47, Guerrero bajó la pelota con el pecho, quedó cara a cara con Vega y definió con mucha tranquilidad para cerrar una inolvidable Copa América para él y para su seleccionado, señala TyC Sports.