La expectativa de mejora en la recaudación prevista en el presupuesto para el próximo año es de un 12 por ciento en lo que respecta a coparticipación de impuestos nacionales, y de un 13 por ciento en cuanto a recaudación provincial.

En el proyecto, como está hoy, se dispone que -como mínimo- un 70 por ciento de esas mejoras se destine a atender reclamos sectoriales, principalmente salariales. Pero de aquí hasta el lunes a las 11 -cuando se prevé que el dictamen esté redactado para tratarlo en la sesión del día siguiente-, los diputados esperan ampliar ese porcentaje. De ser así, se puede afirmar que la expectativa de mejora salarial para 2010 en el Estado provincial rondará el 10 por ciento.

Así quedó resuelto anoche, en una reunión que el bloque de diputados del Peronismo Federal, liderado políticamente por Jorge Busti, mantuvo con el ministro de Economía Diego Valiero, con el propósito de consensuar un dictamen para la Ley de Presupuesto 2010.

Esta prioridad para el destino que se le dé al aumento de recaudación, está expresada taxativamente en el artículo 21, que los diputados lograron modificar como condición para avalar el endeudamiento pedido por el Ejecutivo. Al respecto, el presidente de la Comisión de Presupuesto, Jorge Bolzán, observó que de no haber sido por esta cláusula “la mejora de recaudación tendría que ser destinada a pagar los vencimientos de deuda que no se reprograme, o el déficit que no se logre financiar en los programas nacionales”.

El diputado remarcó a El Diario que, de esta manera, se descomprime “la situación para que cualquier nuevo ingreso por mayor recaudación de impuestos provinciales o nacionales sea destinado como mínimo en un 70 por ciento, a reclamos sectoriales que existan, como por ejemplo los salariales”.

Los artículos que finalmente se acompañarán desde la Cámara de Diputados son el 5, de refinanciamiento de deuda por 462 millones; y el 6, de financiamiento del déficit de 580 millones a través de los planes que el gobierno nacional instrumentó para las provincias “por el déficit que han sufrido debido a la crisis internacional, la sequía, o el conflicto sectorial con el sector agrario”, explicó Bolzán.

Con la prioridad de “bajar el déficit y evitar tanto endeudamiento”, también se plantearon prioridades en materia de obras públicas. En este sentido, Bolzan ratificó que se suprimieron las remodelaciones a los autódromos de Paraná y Concordia y la construcción de un nuevo edificio para Economía, que entre las tres totalizaban 69 millones de pesos.

Entre otras cosas, también se reformó la autorización al Ejecutivo para utilizar fondos de organismos, obligando a la restitución de esas partidas antes de finalizar el ejercicio fiscal.