Además del secretario de Telecomunicaciones, los diputados Albornoz y Uranga apuntaron duro contra el ex intendente.

Respuesta de Delcanto

"Después de todo lo ocurrido, de la inapelable voluntad popular que se llevó puesto al bustismo, en donde se alimenta Halle, éste compañero bien podría haber tenido una actitud que lo arrimara un poco al Turquito que conocimos veinte años atrás en la Juventud Peronista", apuntó Delcanto.

"Hubiera sido digno para él y para muchos la aproximación a una autocrítica. No estamos diciendo un autoflagelo ni someterse al escarnio. Hubiera bastado con decir que los hombres, los militantes, solemos confundirnos. Que a veces las circunstancias nos arrastran por caminos no del todo queridos, y que los objetivos menores pueden ensombrecer y perder de vista los objetivos superiores", añadió.

Enseguida, observó: "Para mayor desilusión, Halle prefirió una torpe fuga hacia delante. La intentona de huir de su propio estado, sin asumir que la reparación está en reconsiderar su propia conducta política y no en escapar señalando inútil y fantasiosamente a otros".

Desde esta visión, "responder a todos y cada uno de los inservibles agravios que descarga Halle, no tiene sentido alguno. Y no lo tiene porque cada agravio es el escalón de una desdichada escalera que inventa para escapar de una frustración que lo supera y no se atreve a enfrentar como se debe".

"Del Turco Halle podía esperarse una señal de sinceramiento con la historia que él mismo en algún momento señaló que debía construirse -y que se está construyendo­, pero optó por el camino más corto: las palabras sin razón que suele dictar la impotencia. Quizás, y sólo quizás, en algún momento pueda encontrar la puerta de la recuperación sana y franca; ese andar donde los militantes se ponen a prueba sabiendo que esto no es para velocistas sino para maratonistas", remató.

Albornoz: "Nunca hubo tanta libertad de expresión”

"Sin dudas coincido con el compañero Báez, en el sentido de la existencia de un enorme desafío tendiente a reconstruir el pensamiento nacional y desmontar esquemas impuestos primero por la dictadura genocida y luego por sucesivos gobiernos absolutamente abyectos, sometidos al interés del imperio y presos de la lógica colonial reproducida por el monopolio comunicacional. Ese relato ha sido amplificado por personajes de la estatura del ex intendente de Paraná, desprovistos de todo vuelo imaginativo y carentes de pensamiento propio", expresó Albornoz.

Y ahondó: "La lectura simplona y comarcana del otrora joven ministro, Halle no hace otra cosa que confirmar el derrumbe del mito de una generación sin compromiso patriótico, sin coraje político. Hoy se victimiza por adelantado pretendiendo talvez que nadie conteste su inconsistente prosa, al mejor estilo de Mauricio Macri, mientras descree que a nosotros nos anime como último objetivo la construcción de una sociedad mejor".

"Resulta ciertamente incomprensible que el malogrado intendente hable de autocensura en el intimidado periodismo, al no poder leer noticias que remitan al fracaso del gobierno, el descontento social o la inviabilidad productiva. Que es lo que él quisiera leer. Este sujeto fue funcionario de primera línea del bustismo, una expresión política entrerriana en extinción que configuró el atraso estructural de la Provincia”, indicó además, en declaraciones enviadas a ANALISIS DIGITAL.

"Es una inmensa mentira que haya voces prohibidas, lo que hay son nuevas voces que irrumpen en una realidad que ha cambiado y continuará cambiando. Y allí hay voces que han perdido predicamento. Quienes tenemos cosas que decir, las decimos. Somos constructores de un nuevo poder, que termino con la idea del liderazgo indiscutido y el líder natural, que ha prohijado a dirigentes como Halle", continuó.

"Su texto es irrelevante, nadie lo intimidará ni agraviará por su diatriba. No hay nada grave en esto. Creo que el ex compañero adelanta una jugada previendo que, la construcción de la sociedad mas justa que debe animarnos a todos, necesariamente debe incluir la revisión de los actos de gobierno que hayan perjudicado el interés público o lisa y llanamente contraríen las normas que rigen una correcta administración de los bienes del Estado”, sentenció.

Afirmaciones de Uranga

“Como si el estado en que dejó la ciudad luego del peor gobierno que soportamos los paranaenses desde el '83, no fuera suficiente para que el ex funcionario municipal callara y fuera juzgado por los hechos, por estas horas Halle casi nos ofende hablando de censura mediática”, opinó Uranga.

Al respecto, evaluó: “Sería interesante para la democracia, la vida política en sí, la dignidad de los paranaenses y del mismo ex intendente en letargo permanente, que no opinara vagamente como observador de la dinámica de los medios de comunicación, sino como responsable de la peor administración municipal que como nunca padecieron los ciudadanos de la capital provincial”.

“El Estado y la sociedad que quiere Halle no los enuncia, porque no son otros que los que lamentablemente conocimos, sufrimos, desde la experiencia de su propio desgobierno: un municipio entregado a las mafias corporativas y los negocios corruptos; la denigración del empleo público y el abandono de la sociedad al más cruel desamparo estatal; la sujeción de los servicios públicos y necesidades sociales al soborno y la coima; el desprestigio del Estado municipal tomado como botín de guerra por una banda de piratas impiadosos, que dejaron las marcas del latrocinio en cada oficina y rincón de la ciudad”.

“Nadie le impone ni impuso censura a Halle, más que su pálida vergüenza. No habla de lo que se le presenta indefendible para su propia estructura semántica. La ciudad y la sociedad hablaron por él, en elecciones en las que sólo en alucinaciones propias de su letargo de marmota, podría sospecharse que lo acompañaría el voto de los paranaenses. Y son la ciudad y la sociedad misma quienes no quieren oír hablar más a semejantes irresponsables”, amplió.

“No hay estrategia comunicacional que pueda ocultar, disimular o disfrazar lo que estaba evidente para el ciudadano menos informado: una red vial urbana destruida y sometida al negocio del emparchado sistemático cada dos meses; la atención de los servicios públicos desde un garito sindical; el espacio urbano ordenado por los filibusteros del negocio inmobiliario; el tránsito vehicular como paradigma del caos y la anomia; el transporte público regulados desde la renta empresaria; el derecho laboral de los empleados municipales, convertido en anotador de la timba donde cuatro tahúres se jugaban la administración del gobierno de la ciudad”, repasó.

Finalmente, le aconsejó al ex jefe comunal que “antes de despertar con una modorra que aburre, libere a los paranaenses de su efímera vigilia y retorne a su largo letargo militante”.

Respaldo a Halle

En tanto, con el título "Cuando se acaban las razones vienen los agravios", el Movimiento Peronista 26 de Julio -bajo los firmantes Mónica Barbabianca, Alejandro Cánepa, Alvaro Piérola y Luis Senger- expresaron mediante un comunicado que "los funcionarios que respondieron, lo han hecho sin referirse al meollo de la cuestión ni negar siquiera los manejos que se hacen desde la cúspide del Estado hacia los medios de información provinciales. Dijo Halle que ya saldrían entonces funcionarios y dirigentes a agraviar o intimidar, y eso es lo que ha ocurrido, ya que se vierten mentiras injuriantes sobre nuestra gestión municipal. Pero ya será el tiempo de debatir y comparar las gestiones municipales, hoy estamos apoyando los dichos del ex intendente, cuando afirma que en Entre Ríos ha disminuido –sino desaparecido- la libertad de expresión y de información de los ciudadanos, porque es prácticamente imposible que las voces opositoras o críticas se recepten por parte de los medios y periodistas enormemente condicionados por las importantísimas sumas de dinero que reciben los medios y el “castigo” que tendrían si osan introducir opiniones diversas. Una sana medida para contestar lo que se critica, sería transparentar y publicar las sumas destinadas a los distintos medios en materia de pautas publicitarias y propaganda en toda sus formas; y no contestar con injurias y mentiras una justa crítica política. O es que ya no se puede hacer ni eso?”.