Se conoció que desde el tres de mayo el acusado había sido declarado en rebeldía por lo que se impuso la orden de captura con el fin de trasladarlo la juzgado de instrucción Nº 1 a cargo de Patricia Yedro.

La causa judicial contra el trabajador público se inició en el 2010, luego de que su ex mujer lo denunciara por considerarlo responsable del Abuso sexual reiterado gravemente ultrajante agravado.

En este contexto, la madre de la criatura de cinco años notó un cambio abrupto en la personalidad de la pequeña por lo que luego de varias medidas se enteró de las penosas situaciones a la que era sometida por el padrastro.

Según precisó Uno, desde ese momento la Justicia realizó varias pericias que terminaron con dar credibilidad a los datos aportados por la madre de la víctima y con la participación de especialistas se tuvo más elementos para apuntalar la denuncia. El acusado fue llamado a declaración indagatoria pero en reiteradas oportunidades no se logró ubicarlo, habida cuenta que el trabajador del organismo público cambió varias veces su domicilio.

Además, en un primer momento notificó que vivía en el Mosconi, luego en Bajada Grande y con posterioridad en el barrio Consejo, pero al no poder ser notificado de las medidas judiciales y teniendo en cuenta su absoluto desinterés en aclarar la denuncia, es que se ordenó la captura. Por otro lado, el denunciado dejó de asistir a su trabajo en el Copnaf. Justificó su ausencia con una llamativa y prolongada licencia por un problema de salud.

Por último, tras ser intimado, el acusado se presentó a la junta médica en calle San Juan, donde personal de la División Delitos Económicos que lo detuvo y derivó a la Alcaidía donde quedó alojado para ser indagado en los próximos días.