Tigre, que descendió a la Primera Nacional en 2019, debutó este miércoles en la Copa Libertadores de América -su segunda participación tras la de 2013- con una derrota 2 a 0 frente a Palmeiras, de Brasil, en encuentro correspondiente a la fecha inicial del Grupo B.

El hecho histórico fue la primera participación de un equipo argentino de la segunda categoría en la competencia más importante a nivel continental, derecho obtenido tras ganar la Copa de la Superliga.

Luiz Adriano y Willian, a los 16 minutos del primer tiempo y 19 del segundo, respectivamente, anotaron los goles del partido, jugado en el estadio José Dellagiovanna, de Tigre, y arbitrado por el colombiano Wilmar Roldán, quien expulsó con roja directa en el local a Matías Pérez Acuña, a los 15 del complemento.

Palmeiras tuvo un gran cuarto de hora inicial, a partir de pelotazos o pases en profundidad de Ramires, Bruno Henrique o los centrales para explotar la velocidad por izquierda de Rony, quien complicó varias veces a la defensa local.

El gol de todos modos se inició en la derecha y cuando la pelota quedó en Luiz Adriano se perfiló y sacó un remate inatajable para Gonzalo Marinelli.

Despertó Tigre en desventaja -que hasta ahí era prolijo en el traslado-, con la velocidad del paranaense Juan Ignacio Cavallaro, quien tuvo dos chances que se fueron desviadas; y el aporte de Facundo Melivillo -tuvo un buen disparo apenas afuera- y Diego Morales, que en una jugada quedó cara a cara con Weverton y perdió ante el arquero.

Salió mejor Tigre en la segunda mitad, a través del manejo de Morales -quien tuvo un cabezazo apenas elevado-, la movilidad del entrerriano Cavallaro y el adelantamiento de sus líneas.

Pero se vio sorprendido en la primera respuesta del visitante con un envío de Ramires al travesaño.

Tuvo más la pelota Tigre pero le faltó resolución, y se complicó por la expulsión de Pérez Acuña, tras lanzar una patada a un rival sin la pelota en movimiento.

En un contraataque Luiz Adriano no pudo con Marinelli y tras el rebote Rony la tiró sobre el travesaño, y en otra réplica quedó frente al ar