El futbolista federalense surgido de las inferiores del Patrón juega actualmente en Tristán Suárez, líder del Metropolitano. El defensor de 26 años suma experiencia en la tercera categoría, en la que pelea por ascender.

Luego de un paso que terminó quedando trunco en Patronato, debido a que no logró debutar en la Primera División (estuvo convocado en un partido frente a San Lorenzo), Bruno Duarte decidió cambiar el rumbo y tras no renovar con el Patrón en junio de 2019 partió a Tristán Suárez.

En el equipo de Ezeiza, que milita en la tercera división del fútbol argentino (B Metropolitana) logró ganarse rápidamente un lugar y fue una fija para el entrenador Aníbal Biggeri, que alguna vez sonó para dirigir al Patrón.

Según explicó Duarte en declaraciones a Ovación, de Diario UNO, su intención en Tristán Suárez era la de jugar la mayor cantidad de partidos posibles en una categoría que, además, es televisada. “Gracias a dios se dio eso y pude demostrar las ganas de jugar y estar siempre. Solamente estuve ausente en un partido, porque había llegado a las cinco amarillas. Después estuve en todos”, contó.

El aislamiento encontró al zaguero disfrutando de su Federal natal, en donde por la poca cantidad de casos de coronavirus (al sábado 15 de agosto sólo dos se registraron en el departamento) se pueden realizar actividades al aire libre.

Su cambio de aires de Paraná a Ezeiza, en donde está Tristán Suárez, provocó en él un cambio de hábitos: “Cuando viví en Paraná estaba acostumbrado a viajar a Federal después de jugar de local, pero cuando me tocó irme a Buenos Aires se hizo más difícil”. Al mismo tiempo, explicó que la gente de su club lo trata bien y lo hace sentir cómodo.

Para el espigado defensor federalense, el cambio de aires lo benefició: “En Patronato no me tocó debutar en Primera. Jugaba en reserva y últimamente era como para hacer fútbol. Cuando me tocó irme a Buenos Aires me cambió totalmente la cabeza. Ya juego por otras cosas, Tengo otros pensamientos. Estoy para pelear por un ascenso, por conseguir un premio. Eso me hace crecer tanto en lo futbolístico como en lo personal. Me formó el carácter, me llevó a pensar de otra manera. Cada vez me siento mejor y estoy muy contento por eso”, valoró.

Luego lamentó la rotura de ligamentos que padeció años atrás, que provocó que perdiera terreno en la lucha por un lugar en la primera del Patrón. “Cuando volví y me sentía bien sabía que la realidad de Patronato era la misma. Al pelear por la permanencia el club se juega mucho como para estar probando y mandar a juveniles a la cancha, y más en mi posición. Me veía venir que no me iban a renovar, pero me sirvió de un montón salir. Si hubiera renovado hubiera estado en la misma situación. Tal vez hubiera jugado un partido de Copa Argentina, pero era muy poco. Ahora estoy dos categorías más abajo, pero estoy jugando por cosas importante en Tristán Suárez. Y poniendo esto en la balanza suma más lo que estoy haciendo en Suárez”, evaluó.

Para Duarte pasar a jugar en Suárez fue reiniciar su carrera: “Le estoy muy agradecido al club. Es lindo sentirse importante. Siempre digo que es importante pensar en uno mismo. Si me tocaba bajar de categoría para crecer, era bienvenido. Hoy lo veo de esa forma. Si Hubiese ido a un equipo de B Nacional, hubiera sido mejor. Hubiera peleado y tal vez me hubiera tocado jugar. Hoy la realidad que me encuentra es Tristán Suárez, donde la peleo y pude jugar casi todos los partidos. Eso me está formando y me hace pensar diferente”.

Pese a su presente en el Lechero, todavía no cierra las puertas a un retorno en el Patrón: “La espina por volver a Patronato siempre va a estar. Me gustaría volver al club de mi provincia. Pero en este momento mi cabeza están puesta en ascender con Suárez y darle una alegría a la gente que siempre nos apoya”, finalizó.