En plena pandemia reconoció que pensó en dejar de correr tras ser descalificado en la primera fecha de la temporada. Se repuso, ganó tres carreras, logró varios podios y pasó a ser el gran favorito de todos. Mariano Werner está muy cerca de consagrarse campeón del TC. Este domingo en San Juan puede lograrlo. Llega como puntero y con altas chances de transformarse en el mejor piloto del país.

Pablo Rochi

Para él, la temporada había arrancado mal, muy mal, no por nada hasta pensó en largar todo. Aquel triunfo y posterior descalificación en la primera carrera del año en Viedma fue uno de los golpes más duros que Mariano Werner experimentó en su trayectoria deportiva.

Había sido un triunfo contundente, no obstante, su auto no superó la técnica y, por consiguiente, fue penalizado con la quita del triunfo. Desde ya, las críticas más ácidas le llovieron a granel y la amargura fue extrema. Semanas después, y ya en plena pandemia, el piloto paranaense reconoció que aquella carrera fue un palazo tremendo que le costó reponerse, a tal punto que hasta pensó en dejar de correr.

"Me dieron muchas ganas de dejar. No solo después de esa carrera sino en este tiempo de cuarentena. Así como uno se alegra cuando las cosas salen bien, también se enoja o se frustra cuando no salen. Son momentos que son difíciles de explicar", había dicho Werner allá por principio de mayo, muy lejos de este presente repleto de agradables sensaciones.

Claro está, sus palabras retumbaron fuerte en el mundo tuerca, más tratándose del referente de Ford desde que Omar “Gurí” Martínez no corre más en el TC. 

El tiempo ubicó a Werner en los dos extremos más opuestos. Entonces, aquel piloto que pensó en dejar de correr pasó rápidamente a vivir los días de mayor adrenalina desde que compite. Triunfos, grandes actuaciones y un crecimiento exponencial lo llevaron a transformarse en el candidato de todos.

Mariano Werner está a un paso de alcanzar el título de campeón del Turismo Carretera, la categoría más importante del automovilismo argentino. Queda una fecha, llega como líder a 18 puntos de su más inmediato perseguidor y con un auto que destila confianza.

El domingo pasado logró un 4° puesto de inmenso valor. La carrera la ganó Julián Santero, con Gastón Mazzacane y Jonatan Castellano completando el podio. Sin embargo, Werner sumó para la corona.

"Fue una carrera muy exigente. Veníamos con un ritmo muy parejo y no quería tirarme porque Castellano venía cerca. Tenemos muy buenas expectativas para el fin de semana que viene”, indicó el entrerriano tras la competencia.

En Argentina, no hay piloto que no sueñe con ganar el Turismo Carretera. Es tocar el cielo con las manos. Es quedar para la eternidad entre los mejores de la historia. Es todo. Werner está cerca de lograrlo. Muy cerca. El próximo domingo en San Juan puede grabar su nombre para siempre entre los próceres del automovilismo argentino. Depende de él, solo de él.

(La nota completa en la edición 1117 de la revista ANALISIS del jueves 17 de diciembre de 2020)