La UCR de Gualeguaychú cuestionó que en este contexto el HCD haya aprobado la Ordenanza que establece la obligatoriedad y gratuidad de la Fiesta del Pescado y el Vino que se realiza a principio de enero.
La Unión Cívica Radical de Gualeguaychú cuestionó al bloque oficialista de Concejales por haber aprobado en la última sesión del viernes pasado, el carácter obligatorio y gratuito de la Fiesta del Pescado y el Vino, que se realiza durante los primeros días de enero.
En un comunicado de prensa, el centenario partido recordó que el bloque de la oposición Juntos por el Cambio realizó objeciones a la iniciativa, pero la Ordenanza se aprobó igual.
“Todos sabemos que vivimos una crisis catalogada como la más grande desde la gran depresión de 1930. Por eso no se entiende que un cuerpo deliberativo se ocupe de estas cosas en estos momentos. Más grave aún es la resolución a la que llegaron: fiesta gratis para siempre. ¿Con qué recursos? Con los de los hambrientos”, cuestionó la UCR de Gualeguaychú.
“Esta decisión Municipal es una burla hacia quienes pagan sus impuestos, o no están pudiendo pagarlos por la crisis; pero principalmente a los que necesitan ayuda estatal y no les llega”, resaltaron.
“Parece que el gobierno no se conforma con tener una corte de 100 funcionarios y asesores políticos rentados a costillas del pueblo: también se le ha ocurrido organizar una fiesta en plena pandemia y declararla obligatoria y eterna, como si se adentrara en las raíces mismas étnicas y culturales de nuestro pueblo”, criticó.
“Asusta ver el espectáculo del Concejo discutiendo y votando una Ordenanza así en este momento. Parece que vivieran en otro planeta”, criticaron los radicales.
“No es momento para sentirse exitoso trayendo artistas de primer nivel nacional que cuestan millones con el dinero del pueblo, porque el pueblo casi no tiene ya dinero, o tiene muy poco. Mejor sería pensar en los verdaderos fines humanitarios y distributivos que se le debiera asignar a esos recursos. El año pasado se gastaron más de diez millones en la fiesta, y se recaudaron solo dos: ocho millones los pusieron los desposeídos en forma de necesidades insatisfechas”, apuntaron.
“El gobierno celebra que le incrementó el impuesto a los bancos y otras empresas que también terminarán pagando los usuarios. Y encima de ello debemos lamentar que ese dinero va a ir a parar al bolsillo de amigos que tienen cargos, contratos o contrataciones vinculadas a este tipo de desvaríos. Un paso adelante para un hombre, y un atraso para las instituciones de la ciudad”, finaliza el comunicado de la UCR Gualeguaychú.