La primera reunión entre el gobierno nacional y el de la Ciudad de Buenos Aires con el fin de acordar el traspaso de los subsidios de 32 líneas de colectivo se realizó este jueves. Fue el inicio de una negociación que tendrá más reuniones por delante pero, según esperan en ambos lados, con un final sin conflicto.

En el encuentro de este jueves, que se llevó a cabo en el piso 12 del ministerio de Transporte de la Nación, estuvieron por parte de la Casa Rosada el Secretario de Transporte, Diego Giuliano; el secretario de Articulación Interjurisdiccional, Marcos Farina; la Subsecretaria de Transporte Automotor, Laura Labat; el Jefe de Gabinete del ministerio, Álvaro Errea y la Subsecretaria de Coordinación y Planificación, Micaela Moran.

Por parte del gobierno porteño estuvieron el ministro de Gobierno, Jorge Macri, y la Secretaria de Transporte de la Ciudad de Buenos Aires, Manuela López Menéndez. La reunión duró cerca de 40 minutos y, según definieron desde ambas partes de la negociación, sirvió para dar inicio a un camino de acuerdo.

El gobierno que conduce Horacio Rodríguez Larreta dejó expuesta su voluntad de asumir el traspaso de las líneas y se mostró conciliador para arrancar la discusión. Un paso posterior será acordar el dato que más le interesa a los usuarios: la tarifa del boleto. Si bien el gobierno nacional tiene la potestad de fijar el precio, el objetivo es poder acordarlo entre ambas partes.

En la Ciudad sostienen que la definición de las tarifas es “exclusiva de la Nación” y que el gobierno porteño “no tiene un marco reglamentario para definir tarifas”. Tiraron la pelota para el campo nacional. Negociar el aumento. De eso se trata y por eso hay un costo político que nadie quiere pagar.

Durante el encuentro acordaron transitar al negociación sobre 4 ejes: jurídico, económico, operativo e institucional. Los equipos técnicos trabajarán sobre esas cuatro mesas para que la coordinación sea acordada en todos los planos y no haya lugar para reproches posteriores.

Lo más importante de la reunión es que la Ciudad dejó en claro su voluntad política de avanzar en el traspaso de las líneas. “La idea es sentarse a conversar seriamente y con una visión metropolitana. Si se da en un marco ordenado y de diálogo, el traspaso se va a concretar”, indicaron fuentes del gobierno porteño a Infobae.

Luego de la reunión Jorge Macri se mostró acuerdista al asegurar que “hay voluntad de sentarnos para construir un acuerdo” y destacar que “fue una buena primera reunión, en la que se acordaron conceptos básicos”. Fue la parte del discurso más conciliador que brindó funcionario porteño.

Después remarcó que “si hay asimetrías entre las tarifas de la Ciudad y la Provincia es responsabilidad del gobierno nacional”. En ese sentido, la explicación del gobierno nacional es distinta. Aseguran que el gobierno porteño redujo a la mitad el porcentaje de subsidio del sistema de transporte.

“En el 2019 pagaban el 82% del subsidio y en el 2022 están en el 44%”, señaló Diego Giuliano durante una conferencia de prensa que brindó al terminar la reunión. Y agregó: “La Ciudad se tiene que hacer cargo de sus servicios y sus competencias. Hay que corregir esa cuenta”.

Durante los 40 minutos que estuvieron reunidos las autoridades de ambos gobiernos también coincidieron en que más adelante se debería sumar a la mesa de negociación el gobierno bonaerense, ya que las 32 líneas tienen origen y destino dentro de la Ciudad de Buenos Aires.

“El grueso de los colectivos arrancan y terminan en la provincia de Buenos Aires. Creemos que hay que conocer la mirada de la provincia. Nación, más adelante, deberá convocar a la provincia. No hay manera de administrar un sistema de transporte de colectivos sin acuerdo entre las tres partes”, resumió Macri.

Al día de hoy la provincia de Buenos Aires se hace cargo del 91% del financiamiento de su sistema de transporte y la Nación del 9% a través del Atributo Social Federal y el Boleto Integrado por trasbordos. Ciudad quiere al gobierno de Axel Kicillof en la mesa.