En numerosas causas judiciales se ha confirmado aquella máxima que sostiene que el narcotráfico busca asentarse en cada estrato social y, allí donde no llega el Estado intenta reemplazarlo con sus recursos. Esto se ha confirmado una vez más en un barrio de Paraná, donde una mujer fue detenida por narcomenudeo, y confesó ser quien maneja un merendero, en un barrio de Paraná.

La investigación fue llevada adelante por personal de la Dirección Toxicología de la Policía provincial durante los últimos meses. A partir del dato de que en un domicilio del barrio Consejo, con la pantalla de un comercio alimenticio, se llevaba adelante la venta de drogas a toda hora, comenzaron con las diferentes tareas para poder identificar a los responsables y reunir pruebas para detenerlos.

La fiscal Mercedes Nin instruyó el legajo al cual se fueron sumando distintas evidencias, principalmente a partir de lo observado y registrado por los efectivos de Toxicología, que trabajaron ocultos en inmediaciones de calle Pringles, entre 3 de Febrero y Sudamérica. Se trata de un territorio con presencia de varios grupos dedicados a la venta de droga en distintas escalas hace muchos años, lindero al barrio 1° de Julio, que en los últimos meses fue noticia por el accionar de grupos violentos dedicados, entre otras cosas, a la venta de drogas. De hecho, se ha mencionado que bandas del barrio Consejo cada tanto se enfrentaban a tiros con otras del 1° de Julio.

Según se informó a Uno, se pudo constatar que el grupo familiar investigado habría ejercido la venta de drogas al menudeo en una pescadería, donde efectivamente se practicaba el comercio de pescado pero a su vez los consumidores de drogas también adquirían allí marihuana y cocaína.

También se sospecha, según lo aportado a la causa, que en la vivienda ubicada enfrente del negocio se vendían drogas, como parte del mismo negocio ilícito.

Los dos allanamientos llevados adelante por Toxicología y de los que también participó personal de la comisaría cuarta, fueron justamente en estos lugares, los cuales comenzaron a las 14 del sábado y culminaron alrededor de las 20.30. El resultado fue el secuestro de elementos relacionados a la causa, aunque una cantidad de droga menor a la que se esperaba: había unos 17 envoltorios de marihuana y cocaína, que por la sustancia en sí y por el fraccionamiento de la misma ya es un indicativo de la actividad ilícita. En el transcurso del trámite de la causa se evaluarán estos elementos junto a los reunidos en la investigación para evaluar la imputación por narcomenudeo. También se incautó dinero en efectivo y celulares que serán peritados.

Finalmente, fueron detenidas tres personas mayores de edad y familiares entre sí: dos hombres y una mujer. Esta es quien sería responsable de un merendero al que asisten niños y niñas del barrio Consejo. En el marco del procedimiento, fueron identificadas 15 personas.

Los tres sospechosos fueron alojados en la Alcaidía de Tribunales y en las próximas horas serán imputados por la fiscal, y se analizarán las medidas cautelares que deberán cumplir mientras continúa el trámite de la causa.