El presidente de la Caja de Jubilaciones, Edgardo Scarione, firmará una única resolución de jubilación para los vocales del Superior Tribunal de Justicia (STJ), Juan Ramón Smaldone y Bernardo Salduna. Será este lunes al mediodía. 

La información fue confirmada por el programa de televisión Cuestión de Fondo (Canal 9, Litoral), desde donde se razonó que, si se aplica el mismo criterio que con Emilio Castrillon, quedarán fuera del Alto Cuerpo en forma automática ese mismo día.

También trascendió que incluso Smaldone ya habría llevado todas sus pertenencias del departamento donde estaba en Paraná a su Concordia natal, “cabecera de playa” que también lo encontrará cuando regrese de Israel el ex gobernador Sergio Urribarri, condenado en primera instancia por hechos de corrupción a ocho años de cárcel.

El Jury a Goyeneche

La ex Procuradora Adjunta y Fiscal Anticorrupción, Cecilia Goyeneche, en su momento presentó la recusación formal contra Juan Ramón Smaldone en el marco del Jury de Enjuiciamiento que se le siguió en su contra. El objetivo en ese entonces era apartar a uno de los representantes del Superior Tribunal de Justicia (STJ) del Jurado.

El escrito había sido presentado en la previa de los alegatos de clausura de cada una de las partes. El argumento central es que Goyeneche consideró que Smaldone no iba a ser imparcial a la hora de juzgar su comportamiento debido a que el Ministerio Público Fiscal (MPF) había imputado en una causa d corrupción al hijo del vocal del STJ, en el marco de una causa por negociaciones incompatibles con la función pública, fraude y cohecho pasivo.

“En la investigación llevada adelante por el MPF, que ha concluido en su fase de Investigación Penal Preparatoria (IPP) con la formulación de dicha acusación, he tomado intervención en mi calidad de Procuradora Adjunta y Fiscal Anticorrupción coordinando la actividad de los señores fiscales”, expresó Goyeneche en aquel escrito de recusación.

En esa línea, Goyeneche había ampliado: “Todo ello me coloca en una situación de grave preocupación en relación a la parcialidad del jurado, que ya observamos y denunciamos en escritos anteriores, pero que ahora se renueva en relación con los motivos particulares de parcialidad hacia la suscripta atento a la existencia de una persona de su círculo más íntimo que ha sido acusado por el equipo de fiscales que coordiné hasta mi suspensión”.

Smaldone, el bendecido por Urribarri

El 22 de octubre del año pasado, ANÁLISIS ya había adelantado que Smaldone había anunciado que se acogería al beneficio jubilatorio. En mayo de 2021, se había acogido al retiro el expresidente del máximo organismo judicial, Emilio Aroldo Castrillon, y junto al anuncio de Smaldone, también se conoció que el vocal Bernardo Salduna también había iniciado el trámite ante la Caja de Jubilaciones y Pensiones.

Con el retiro de Smaldone, la Sala Civil y Comercial del STJ quedará una vacante en la Sala Civil y Comercial, dado que la integra Martín Carbonell, desgnado por el gobernador Gustavo Bordet, y desde febrero Gisela Schumacher. La novedad sobre la decisión de acogerse a la jubilación de Smaldone fue confirmada por fuentes judiciales ante la consulta del portal Entre Ríos Ahora. El vocal hizo saber que presentaría su trámite de inicio de la jubilación, tras 47 años de servicio activo en la Justicia.

Smaldone llegó a ocupar uno de los nueve sillones del STJ durante la administración del exgobernador Sergio Urribarri. El magistrado tomó posesión de su cargo en un acto que tuvo lugar el 12 de noviembre de 2010. “Es una satisfacción poder designar a una persona de la trayectoria de Juan Ramón Smaldone en este Cuerpo que venía con la necesidad de cubrir la vacante dada por el doctor (Juan Carlos) Ardoy”, se congratuló en ese entonces Urribarri, sabiendo a quién colocaba en un lugar estratégico para ejercer el poder con mayor impunidad.

Fue a propuesta de Urribarri y con el acuerdo constitucional del Senado donde el oficialismo ostentó una de sus mayorías más absolutas, Smaldone fue designado miembro titular del STJ, mediante el Decreto Nº 3853 del Ministerio de Gobierno. Smaldone ingresó al Poder Judicial en 1988, y por decreto ministerial fue designado como vocal de la Cámara Civil de Concordia. En 2009, mediante acuerdo del STJ asumió como vocal provisorio de la Sala del mismo fuero, por jubilación de Juan Carlos Ardoy.

Cabe recordar que el 11 de mayo de 2021, la Caja de Jubilaciones le otorgó el beneficio jubilatorio a Emilio Castrillon, y de ese modo se volvió abstracto el trámite de juicio político que se había abierto en la Cámara de Diputados.

La jubilación de Salduna

El vocal de la Sala del Trabajo del Superior Tribunal de Justicia (STJ), Bernardo Ignacio Ramón Salduna, también inició el trámite de jubilación ante la Caja de Jubilaciones y Pensiones de Entre Ríos.

Antes de iniciar el trámite jubilatorio, Salduna había iniciado una demanda en la Justicia.

A través del Decreto N° 1.531, del 24 de junio de 2021, el Poder Ejecutivo autorizó al fiscal de Estado, Julio Rodríguez Signes, “a celebrar un convenio conciliatorio con el Dr. Bernardo Ignacio Ramón Salduna, en el marco de los autos caratulados ´Salduna, Bernardo Ignacio Ramón c/ Caja de Jubilaciones y Pensiones de la Provincia de Entre Ríos y Estado Provincial s/ Acción meramente declarativa´ (Expte. N° 1.105), que ponga fin a ese litigio, en trámite por ante la Excma. Cámara en lo Contencioso Administrativo N° 1”.

El 12 de octubre del año pasado, ANÁLISIS daba cuenta que Bernardo Salduna, había iniciado los trámites para acogerse a la jubilación.

El trámite para el pase a retiro del vocal del STJ fue registrado en la Caja de Jubilaciones de la provincia en la jornada de ese mismo 12 de octubre; luego que el vocal alcanzara un acuerdo con la Fiscalía de Estado para poder acogerse a un retiro en la jurisdicción provincial y no por la Anses.

Salduna integra junto a Germán Carlomagno y Susana Medina la sala del Trabajo del STJ.

La Constitución provincial reformada en 2008 fijó que la integración del Superior se tiene que hacer con números impares y con un mínimo de cinco integrantes. Posteriormente, la aprobada ley de igualdad de género estableció que su composición tiene que ser paritaria entre hombres y mujeres. 

Pasados en edad

La mayoría de los miembros del STJ están en condiciones de jubilarse en Entre Ríos. No lo hacen porque aún deben cumplir mandatos de favor con el poder político.

Desde el Poder Ejecutivo entrerriano se mira con atención lo que puede suceder este año con algunos integrantes del Superior Tribunal de Justicia. Sucede que la mayoría está en condiciones de acogerse a la jubilación ordinaria, por la edad que tienen y también por la cantidad de aportes que hicieron en varias décadas. Es el caso, por ejemplo, del propio Bernardo Salduna, que el 16 de agosto cumplirá 77 años de edad.

“Yo no quiero entrar en una discusión de franjas etarias pero el hecho que está establecido a nivel de la Corte Suprema para la Justicia Federal de 75 años creo que es una buena limitante para poder generar este recambio”. La frase la dijo el gobernador Gustavo Bordet en el último programa de 2020 de Cuestión de Fondo (Canal 9 Litoral) y provocó lo más parecido a un llamado de atención entre los mayores de edad del Superior Tribunal de Justicia de la provincia; aunque todo cayó en “saco roto” a juzgar por las posturas adoptadas.

Germán Carlomagno cumple 73 años en febrero. Daniel Carubia también llegó a los 72 años en mayo pasado y es el más antiguo: fue nombrado por el exgobernador Jorge Busti en 1988, en su primer mandato.

Juan Smaldone cumplirá 70 años en julio y un día antes del concordiense, Susana Medina (actual presidenta) celebrará los 67 años. Uno de los más nuevos en el STJ, Miguel Angel Giorgio, llegó a los 64 en marzo pasado. Claudia Mizawak estará en los 61 a mediados de diciembre de este año. Y el más joven es el también concordiense Martín Carbonell, que a fines de agosto cumplirá 59 años.

Más allá del cronograma de edades y de fechas por cumplir, casi nadie ha transmitido entre sus pares la posibilidad de abandonar el cargo y pasar a cobrar una jubilación que supera los 600 mil pesos mensuales.