En su columna de todas las semanas, en el programa A Quien Corresponda, que se emite por Radio De La Plaza (94.7), en el inicio Flotta habló de la salida de Sebastián Méndez de Unión de Santa Fe: “Los contratos hay que respetarlos de los dos lados, tanto de los entrenadores, como de los clubes, porque cuando pierdo dos o tres partidos me echan y nadie dice nada con un contrato de por medio. Creo que falla la Asociación de Técnicos”.

Aunque aclaró: “Claro que me pongo en la piel del hincha de Unión y la situación duele, porque venía de racha y ahora se va”.

En otro tramo se refirió a los homenajes a Maximiliano Rodríguez y Juan Román Riquelme y destacó que “fue muy lindo lo que se vivió en Rosario con la revalidad entre Newell’s y Central, donde aplaudieron a Di María. Todo eso le hace bien al fútbol, hay que terminar con esa violencia tan mal encarrilada”.

Después repasó un nuevo aniversario del descenso de River a la Primera B Nacional, donde fue protagonista ya que integraba el cuerpo técnico de Belgrano de Córdoba. “Fue una hazaña para Belgrano porque mandamos a River a la B”.

Y recordó una anécdota: “La noche al partido la gente de River cantaba afuera del hotel y no se podía dormir. Se llamó a la policía y no se pudo hacer nada”.

Y siguió: “Pero hay un suceso que no trascendió. Tipo 4 de la madrugada estábamos todos durmiendo y comienza a sonar la alarma de incendio en el hotel. Rápidamente desalojemos las habitaciones y después nos enteramos que habían infiltrado hinchas de River que pusieron una bomba de humo y saltaron las alarmas. En ese momento habría que haber suspendido el partido, pero se jugó igual y se tuvo la suerte de subir a primera y mandar a River a la B”.

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