La Comisión Asesora y Fiscalizadora (CAF) de la Asociación Corredores Turismo Carretera se expidió luego de la seguidilla de denuncias técnicas y exclusiones en la 11ª fecha del Turismo Carretera que se disputó en San Luis el pasado 15 de septiembre. El ente fiscalizador dictaminó fuertes multas para los distintos protagonistas de aquel domingo escandaloso, en el que se revisaron los motores de siete autos y cuatro de ellos fueron excluidos.

José Manuel Urcera (Ford Mustang) recibió una multa de 10.000.000 de pesos y deberá largar último en su serie en la próxima fecha, la que se disputará en Paraná este fin de semana. La sanción sobre el campeón 2022 es porque su equipo, el Emanuel Moriatis Competición, se negó a abrir el motor -que prepara Julián Adamo– para que fuera inspeccionado por la Técnica. Un caso inédito en las últimas décadas.

En tanto que Facundo Ardusso (Chevrolet Camaro), Federico Iribarne (Chevrolet Camaro) y Juan Martín Trucco (Dodge Challenger), deberán pagar una multa de 5.000.000 de pesos y también tendrán que largar último en su serie en la próxima fecha que dispute. En el caso de Ardusso, se había detectado anomalía reglamentaria en la admisión del motor que arma Rody Agut.

Mientras que Iribarne y Trucco estaban excedidos en la cilindrada de los multiválvulas que alistan Daniel Berra y los hermanos Silva, respectivamente, señala SoloTC.

Las denuncias y exclusiones en el TC en San Luis

Apenas terminó la carrera del TC en San Luis, Esteban Gini (Toyota Camry NG) se acercó a los comisarios deportivos para denunciar irregularidades en los tres autos del podio (Julián Santero, Manu Urcera y Facundo Ardusso) y en el Dodge Challenger de Otto Fritzler.

A su vez, Federico Iribarne (Chevrolet Camaro), que fue convocado a revisión por sorteo, denunció a Juan Martín Trucco (Dodge Challenger) para que sea revisado su multiválvulas tras llegar cuarto. En tanto que Santiago Mangoni (Chevrolet Camaro), quinto en pista, también entró en revisión por sorteo. 

De los del podio, solo Santero (con motorización de Mauricio Candela) pasó la inspección: el equipo de Urcera se negó a abrir el motor y el Camaro de Ardusso no respetaba el reglamento en la admisión. En tanto que Trucco e Iribarne estaban excedidos en la cilindrada. Mientras que el impulsor de Mangoni, que alista Ezequiel Giustozzi superó la revisión técnica, al igual que el de Fritzler que es responsabilidad de Alfredo Fernández.

El caso del piloto del Moriatis Competición es muy particular. La sanción fue por la negativa a desarmar el motor. El Mustang N°231 estuvo en el parque cerrado hasta el final de las revisiones técnicas. En principio rodeado por el motorista Julián Adamo, el concurrente del auto y algunos mecánicos. Pero al tiempo quedó solo custodiado por un par de mecánicos y, curiosamente, con el motor de repuesto junto al titular.