El titular del Instituto Autárquico de Planeamiento y Vivienda (IAPV) y diputado nacional electo por el Frente de Todos, Marcelo Casaretto, analizó el resultado de las elecciones de este domingo.

Consultado por los motivos por los que el Frente de Todos perdió en la provincia, Casaretto valoró que “en primer lugar, se ganó la Presidencia de la Nación y Alberto y Cristina son presidente y vice electos con un gran triunfo electoral que tuvo el Frente de Todos en Argentina y a partir de ahí se puede analizar dónde perdió, dónde se ganó y dónde empatamos”.

“Si se mira el mapa quedó azul arriba y abajo y quedó amarillo en al franja central del país, con Alberto Fernández en las PASO sacamos 47% en Argentina y ahora sacamos también 47% y en Entre Ríos habíamos sacado 45% y ahora también sacamos 45%. Lo que pasó es que entre las PASO y las Generales se sumaron muchos votantes –en agosto había votado el 76% y ahora votó casi el 81% del electorado- con lo cual sacamos más votos que en las PASO en las tres categorías en Entre Ríos pero Juntos por el Cambio sumó más votos que nosotros, sea por gente que no había ido a votar en agosto o por gente que había votado a partidos más chicos”, analizó el funcionario en declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza).

Agregó que “si se mira la franja central del país, ellos mejoraron en todos los lugares: en Capital Federal pasaron de 48 al 55%; ganaron en provincia de Buenos Aires en todas las zonas de clase media urbana, y en Santa Fe, Córdoba, San Luis, Mendoza ganó Cambiemos, pero en Entre Ríos hay un final de bandera verde con una diferencia que está en torno a los 1.000 habiendo completado el escrutinio del 98% de las mesas y faltando el escrutinio definitivo”.

Asimismo, planteó que “dentro de la provincia tuvimos resultados adversos en Paraná, Gualeguaychú, Uruguay, y en toda la zona productiva de Paraná Campaña, Diamante, Victoria, Gualeguay; pero ganamos en Concordia y en el norte como Feliciano, Federal, La Paz; en el centro se ganó en Villaguay, Tala y Nogoyá, más Islas del Ibicuy”.

Consultado por la falta de militancia como producto de dicho resultado adverso, Casaretto afirmó que “siempre se puede hacer más”. “Soy como el jugador que termina un partido y corrí desde la primer pelota hasta la última, pero después los esfuerzos de cada uno que los pondere cada uno”, planteó.

“Lo que puedo decir es que esto es una elección nacional, si se considera el caudal electoral que sacó el justicialismo hace cuatro años atrás en las elecciones generales mejoramos los porcentajes y el caudal electoral, pero indudablemente la campaña final que hizo Macri le permitió llegar a todo el voto de clase media urbana de la Argentina con factores comunes. Más allá de que se pueda analizar qué pasó exactamente en Paraná, Santa Fe, Córdoba, Mendoza, La Plata o Mar del Plata, lo que tiene una estructura similar tuvo resultados más o menos similares y eso no tiene que ver con que haya un candidato a diputado o senador en un pueblo; esto es una elección nacional con fuerte influencia de los medios nacionales”, analizó.

En tal sentido, remarcó que “las encuestadoras en las PASO le erraron en grande porque nadie previó el gran voto en favor de Alberto que ganó por más de 16 puntos en Argentina y ahora no previeron el crecimiento de Macri y en definitiva Alberto termina ganando por unos siete puntos con lo cual la diferencia a nivel de Argentina se recortó en más de ocho puntos”.

Al respecto, afirmó que “esto tiene que ver con una elección nacional, Macri en 2915 ganó por 2% en segunda vuelta y Alberto ahora está ganando por más de siete puntos en primera vuelta electoral, o sea que uno gane no significa que ganará por goleada todos los partidos ni tampoco que los adversarios no se presenten; sino que se presentan y tienen un caudal electoral importante. No hay que olvidar que Cambiemos ganó en las generales de 2015 y ganó las elecciones 2017, tiene una representación parlamentaria muy importante y la seguirá manteniendo pero ganamos el partido que era ganar la Presidencia de la Nación argentina y ahora tendremos la tremenda responsabilidad de gobernar a partir del 10 de diciembre”.

En cuanto a la situación de los mercados tras el comicio que se muestran más calmos que en el lunes posterior a las PASO, sostuvo que “tiene que ver con los resultados porque una buena parte de la sociedad argentina esperaba que Alberto sacara más porcentaje de votos y más diferencia y en general no se esperaba que Macri subiera entre ocho y nueve puntos, del 32% nacional a casi más de 40%; entonces el resultado que se da, de 47 a 40%, está marcando una relación de fuerzas en la cual Alberto gana la Presidencia con buena representación pero necesariamente tendrá que convivir –de hecho desde hoy hasta el 10 de diciembre- con el gobierno que tiene las riendas, y desde allí en adelante tendrá que tener en consideración que ganó pero que no tenemos un cheque en blanco para conducir la Argentina en los próximos cuatro años”.

Ante ello, aseveró que “el diálogo siempre tiene que estar presente y aún más, tendrá que estarlo particularmente en esta circunstancia”.