El ministro de Producción de la provincia, Juan José Bahillo, brindó precisiones respecto de la nueva etapa que se vivirá en Entre Ríos, con la excepción de más actividades al aislamiento obligatorio.

En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), Bahillo afirmó que “la primer responsabilidad de haber logrado este status epidemiológico es cuidarlo, porque lo peor que podríamos hacer es creer que esto está resuelto y es una batalla ganada, sino todo lo contrario; esto es día a día y recién empieza”.

“Una de las cuestiones más gravosas que tiene esta pandemia es la incertidumbre que tenemos, no hay experiencia previa, se va aprendiendo sobre los sucesos y una de las mejores decisiones que tomó el Presidente de la Nación es rodearse de expertos en la materia y tomar las decisiones en base al asesoramiento de ellos. Por eso, lo menos que podemos hacer nosotros es acatar las decisiones en materia de salud pública que vienen de Nación e ir evaluando permanentemente las cuestiones a nivel provincial a través de las autoridades sanitarias”, definió.

En ese marco, resaltó que “la situación en que está Entre Ríos es que no tenemos circulación interna del virus y tenemos que reforzar el control de los siete pasos fronterizos para poder conservar este status y la conducta social, y a partir de ahí se abre alguna expectativa en los sectores productivos”.

Detalló que “de las 15 ó 16 actividades que había exceptuadas, con las dos que se exceptuaron anoche que son las obras de construcción privada más las profesiones liberales ya son 33 actividades exceptuadas desde el DNU original: toda la cadena alimentaria, el sector primario, el sector del campo, la industria farmacéutica, fábrica de maquinaria vial y agrícola, sector minero y forestal, el sector comercial a través de plataformas virtuales y venta telefónica y servicio de delivery, además de otras”.

A ello, agregó que “si bien hay que seguir gestionando porque quien excepciona es el Presidente de la Nación o el jefe de Gabinete, no pueden hacerlo los gobernadores ni los intendentes, pero se elaboró un instructivo del Ministerio de Desarrollo Productivo donde los sectores industriales pueden empezar a pedir – previa autorización del gobierno provincia y previa evaluación de las autoridades de salud- las excepciones”.

Por otra parte, admitió que “el transporte público es un problema más que nada para Paraná y Concordia” que son grandes ciudades y aclaró que “en cuanto a la construcción se dispone que se trabaje hasta 10 personas por turno en las obras privadas y se desalienta –en la medida de lo posible- el uso del transporte público, lo cual en las localidades más pequeñas es más fácil”.

“Que volvamos a trabajar no significa que lo hagamos como lo hacíamos antes del 15 de marzo, los sectores que están excepcionados deben volver a trabajar bajo estrictas normas de seguridad en materia de salud pública, con distanciamiento social, evitando usar superficies de contacto comunes, usar tapabocas en lugares donde hay concentración de gente, lavarse las manos permanentemente”, advirtió el funcionario.

Ante ello, insistió que “en esto hay una responsabilidad muy grande de los empresarios, de las pymes, de los comerciantes, de los trabajadores y de todos los que se van a movilizar a partir de estas excepciones, porque el Estado debe controlar pero no se puede poner un inspector en la puerta de cada fábrica o de cada comercio. Debe haber una responsabilidad individual para conservar este status que hemos logrado”.

Respecto de la posibilidad de seguir abriendo actividades, dijo que “en materia de salud a nivel nacional como provincial es un monitoreo y una evaluación diaria, con un seguimiento muy estricto de todos aquellos casos que aparecen como sospechosos, y de todo el entorno, y hay que ver como evoluciona toda esa posible cantidad de contagiados que puede haber a partir de cada caso”. “Se ha hecho un monitoreo muy importante en la provincia a partir de cada caso sospechoso a todo su círculo de proximidad que pudo estar contagiado, con un seguimiento personalizado y diario, con características humanizantes y la sensibilidad del caso”, planteó.

Agregó que “haciendo un seguimiento de cómo se va evolucionando se podrá ir viendo la posibilidad de seguir excepcionando algunas actividades, pero siempre el Ministerio de Salud deja a salvo y pretende tener la facultad –y en esto el gobernador está de acuerdo- de que si hay nuevos casos  determinados lugares que ameriten tomar decisiones más extremas se va a volver a la cuarentena y se perderían las excepciones”.

Adelantó que “las nuevas modalidades pueden ser poner en cuarentena a comunidades pequeñas; si en alguna ciudad pequeña hay una serie de casos que son proporcionalmente importantes se puede aislar a toda la ciudad –salvo en cuestiones alimentarias o de salud- con un aislamiento total; o en ciudades más grandes se podría hacerlo por barrios o sectores”. “Es una medida que también se evalúa porque si pensamos que esta batalla está ganada, estamos haciendo una lectura equivocada”, reveló.

En ese contexto, Bahillo dijo que “los números que se evaluaban acá cuando se inició el aislamiento metían miedo y eran preocupantes, y afortunadamente no se dieron pero eso no significa que esta batalla esté ganada; cuando relajemos las normas de conducta y no tengamos los cuidados necesarios en la higiene personal y el distanciamiento social, vamos a retroceder en la situación y vamos a volver a aislarnos, lo que será mucho más doloroso y más traumático porque las economías familiares no resisten mucho más”.

“La mejor manera de cuidar la economía, que entiendo y comprendo lo que angustia a los sectores trabajadores y cuentapropistas, es tener conductas sociales que nos eviten la propagación del virus. Si seguimos con esas conductas vamos a poder seguir manteniendo estos niveles de actividad económica y no habrá que retroceder al aislamiento, y si hay que retroceder va a ser mucho más duro porque nos va a agarrar con la economía mucho más vulnerable”, reflexionó.

Por último, reiteró que “toda la actividad primaria está trabajando con normalidad, la agricultura y la ganadería, la avicultura, la lechería, el sector forestal, el sector arrocero que tuvo la campaña de cosecha en el medio de esta cuarentena, están todos trabajando con normalidad; se está terminando la cosecha de soja con rindes dispares” y aclaró que “hay algunas cuestiones como remates de feria que son muy importantes para la comercialización donde se toman medidas preventiva y se ha modificado un poco el funcionamiento pero se está trabajando normalmente y la actividad primaria no ha tenido interrupción en la provincia”.