A estas Leonas les sobra garra y corazón, y lo demuestran en las adversidades, cuando el rival piensa que están en el piso sin ánimo de reacción. Y ahora lo sufrió Holanda, que a falta de un minuto se quedaba con el pase a la final en el Champions Trophy, hasta que una corajeada de Delfina Merino derivó en el penal que Barrionuevo ejecutó para sentenciar el 2-2 final en tiempo reglamentario.

Las chicas de Retegui habían arrancado arriba gracias a Josefina Sruoga. Sin embargo, las holandesas, con goles de Paumen y Dirske, lo dieron vuelta. Pero Argentina no se cansó de ir a buscar e incluso, a dos minutos del final, el DT sacó a la arquera Succi y metió a Sofía Maccari, para jugársela a todo o nada. Y salió bien, porque la mediocampista recuperó la bocha que derivó en la acción final que terminó determinando el alargue y dándole una vida más a las nuestras.

Sin mucho que destacar en el tiempo extra, fueron a los penales. Y ahí apareció la heroína de la noche, la guerrera que después de algunos malos momentos en la selección necesitaba demostrar que seguía vigente. Belén Succi, ídola en silencio, tapó los cuatro tiros holandeses y, sumado a los convertidos por Sánchez Moccia y Lucha Aymar, Las Leonas consiguieron el pase a la final.

En la final espera Gran Bretaña, que derrotó 2-0 a Alemania. Argentina llega con el ánimo en alza y con la confianza de que estas selecciones que salen a jugar son las que más las benefician. Rosario tiene la posibilidad de ser testigo del último título de Lucha Aymar en casa.